Después de una breve distracción, Gorrión se sacudió la cabeza, centrándose de nuevo en la tarea que tenía entre manos. Pero antes de que pudiera reaccionar, sintió un tirón repentino en la parte trasera de su cuello. En un instante, estaba siendo arrastrado hacia atrás, junto con la persona a la que había apodado Almacenamiento Portátil. Ambos fueron cogidos completamente por sorpresa mientras Rosa los arrastraba como un par de ropas andrajosas colgando de un perchero. La confusión se reflejaba en sus rostros mientras tropezaban, impactados por su agarre inesperado y enérgico.