Después de que Kisha terminara de organizar a aquellos con dones y talentos para ser cuidados por sus familas u otros trabajadores y de enviar a aquellos sin dones a cuarentena aislada, ya estaba oscureciendo. Tomó su licencia y se dirigió a casa, donde Duke y Winters la esperaban, sentados en círculo en la sala de estar.
Gorrión, Buitre y Tristan se quedaron atrás para ayudar a Aston a mitigar y pacificar a la población aterrorizada que había presenciado a más gente desplomándose en las calles o en sus hogares. También fortalecieron la defensa de la base, asignando a los nuevos reclutas su primera tarea de patrullar la base en grupos de cinco.