Todos en la habitación asintieron en acuerdo mientras esperaban con ansias sus roles asignados, observando todo el tiempo los planes de Kisha para el refugio. Cuanto más escuchaban, más visualizaban un futuro más brillante para el refugio, con menos personas sintiéndose indefensas y sombrías en los rincones.
Ahora, podían vislumbrar un camino hacia un futuro próspero, incluso en medio del apocalipsis y la constante amenaza de zombis antropófagos. Una sonrisa se extendió lentamente por sus rostros mientras seguían escuchando atentamente.
—Ahora, ahora, eso no es todo. También quiero nombrar a Águila Calva como Capitán de la Patrulla de la Ciudad junto con su equipo para que sean los guardias de la ciudad y mantengan el orden en el refugio. Solo con orden podremos dormir tranquilos por la noche —dijo Kisha.