Mientras experimentaba los efectos de la Miel Escarlata, Kisha observó que los principales dantians estaban ubicados en tres áreas clave: la cabeza, el pecho y el núcleo inferior cerca del ombligo. Estas regiones parecían funcionar como reservas donde la energía fluía principalmente y se acumulaba antes de ser distribuida para activar sus habilidades despertadas según fuera necesario.
Kisha monitoreaba diligentemente las tres ubicaciones específicas, sintonizándose con el flujo de energía espiritual que recorría el cuerpo de Duke. Sintió una ola de alivio inundarla al no percibir disturbios o problemas emergentes. La Miel Escarlata continuaba navegando su camino sin obstáculos, avanzando constantemente durante diez minutos completos, reflejando la propia duración de Kisha.