—¡Sin problema! —Si Fuqing hizo un gesto de aprobación—. No me importaría si me enviaras una foto como prueba de mi excelente gusto.
La cena se terminó rápidamente.
Feng San acompañó a Yu Xiheng hasta su estudio.
—Tío Nueve, ¿quién le enseñó exactamente a la Señorita Si sus habilidades médicas? —Feng San se preguntó en voz alta—. Ella puede realizar cirugías cerebrales que incluso el Dr. Lin no podría, y también puede tratar piernas.
Aunque ambos son campos médicos, la ortopedia y la neurología son completamente diferentes.
La expresión de Yu Xiheng era fría y distante. —Si realmente no tienes nada más que hacer, ve a regar las plantas.
Feng San tragó el resto de sus preguntas y salió rápidamente del estudio.
Como subalterno, su estatus era evidentemente bajo.
¿Quizás debería comprarle ropa a Yu Xiheng también?
Parecía una idea factible.
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A la mañana siguiente, Si Fuqing organizó hojas para Xu Xiyun y Xie Yu, y los tres fueron al hospital privado.
