—Eh, por cierto, Qingqing, ¿ya se han anunciado las estrellas secundarias para la actuación? —preguntó Yu Tang con interés—. ¿Quién está en tu clase?
—Top secret —respondió Si Fuqing, pellizcando sus palillos—. Pero el grupo de Lu Yan consiguió a Bie Yunxi, el Primer Amor Nacional.
—¿Qué? —La ira de Yu Tang se encendió al instante—. ¡Tío Nueve, no debes ir a la actuación!
Yu Xi Heng levantó la vista, sus cejas se movieron ligeramente mientras esperaba sus próximas palabras.
—¡Es esa Bie Yunxi! —dijo Yu Tang con enojo—. ¿Has olvidado cómo intentó coquetear contigo?
Finalmente, Si Fuqing recordó por qué el nombre le sonaba familiar; había oído sobre ello en los chismes de Yu Tang.
Finalmente, Yu Xiheng habló, —¿Quién?
Yu Tang explicó, —Tío Nueve, ¿acaso no puedes recordar las caras de las mujeres, o es esa la razón por la que sigues soltero?
—¿Es así? —El tono de Yu Xiheng se mantuvo inalterado—. Bueno, tendré que ver si es tan bonita como ella.