—Lin Ershuan no esperaba que Jin Lingling le volviera a dar la vuelta a la situación y rápidamente replicó: «No, no, esto no es obra mía. Señorita, si no me cree, es bienvenida a venir a ver por sí misma. Esto, y esto, las clavijas de madera de estas dos ruedas son completamente diferentes. Puede ver de un vistazo cuál fue hecha por mí y cuál no».
Es lo mismo con los carpinteros, como con cualquier otra persona que trabaje con sus manos; pueden reconocer su propio trabajo sin importar cuánto tiempo haya pasado. La familia Jin dirige una cervecería de vinagre y no podría dejar de reconocer su propio vinagre si lo probaran en otro lugar. Lo que Lin Ershuan explicó era precisamente este concepto.