—Las palabras de la señorita Yang son ciertamente verdaderas —antes de que Prince Ning pudiera responder, Long Jingxi ya había hablado—. Tío Imperial Ning, permita que el Doctor Yao y el Doctor Zhang (el joven médico imperial) sigan al Doctor Luo adentro. El resto de nosotros no entrará, para evitar molestar al Tío Imperial.
—Prince Ning sintió profundamente que esto era razonable y por tanto asintió.
—El Doctor Yao y el Doctor Zhang sintieron alegría en sus corazones, contentos de haber logrado por todos los medios seguir, de lo contrario se habrían perdido presenciar tal habilidad médica.
—Los otros médicos imperiales estaban indignados, sin embargo, no podían hacer nada ya que la Princesa Mayor había hablado y Prince Ning había estado de acuerdo. Así que tuvieron que quedarse fuera, resentidos secretamente con Yang Mengchen.