A primera vista, Meng Yunhan quedó totalmente conmocionada. Incluso a distancia, podía ver claramente su rostro demacrado. Sus mejillas antes regordetas ahora estaban marchitas, su frente resaltaba agudamente.
—Ahao, Ahao... —la madre de Yunhan se adelantó corriendo, llamando su nombre. Ella pensaba que Yun Hao solo estaba dormido y que su voz lo despertaría.
Pero la persona en la cama del hospital no respondió.
Meng Yunhan comenzó a sospechar que algo estaba mal.
—Yun Hao, Yun Hao. —Instintivamente extendió la mano y tocó su nariz, sintiendo un leve calor. Su corazón, que se había hundido, subió levemente de nuevo.
—Yun Hao, Yun Hao, ¿qué te pasa? ¿Qué sucede, qué te pasa? —Meng Yunhan colapsó sobre Yun Hao, sacudiendo violentamente su cuerpo. Habiendo vivido tantos años en su vida pasada, no tenía idea de qué podría causar esta condición.
¿Un vegetal?
¿Un vegetal?
¿Fue porque había renacido y cambiado cosas?
¿Es esta la razón por la que Yun Hao estaba en este estado?