(Antepenúltimo capítulo de mi libro. Un agradecimiento especial a cada uno de los lectores que me apoyaron.)
Es la última oportunidad para escapar. —No te dejaré ir después de eso —Lotus se acercó más a Razial y arqueó su ceja. Razial le ofreció una sonrisa que le derretía el corazón y que siempre hacía que su corazón saltara en anticipación.
—No me voy a ir a ningún lado, Loti. Tú y yo somos para siempre —Tomaron sus posiciones frente al gran arco que Lotus había construido con plantas entrelazadas y flores rosas.
Faris y Aiko tomaron sus posiciones a su lado, tomados de la mano y saludando a la manada que se había reunido para presenciar este monumental evento.