Fownso había logrado extraer el veneno de la serpiente de la sangre seca de Cassandra. Pero los resultados fueron asombrosos, nunca había visto un veneno como ese. Era un tipo raro, un tipo que se desarrollaba en las serpientes hembras como un mecanismo de defensa contra un enemigo. Sin embargo, no pudo identificar la especie porque el veneno era peligroso pero común entre varias especies femeninas.
Informó a Siroos de sus descubrimientos, lo que también lo dejó perplejo. Había intentado localizar a la serpiente, pero sin ningún olor ni evidencia, no tenían mucho con qué seguir. Con los Ancianos presionando y manteniendo distancia de su compañera, era una tortura.
Mañana sería su ceremonia de apareamiento con Cassandra, y su conciencia le carcomía. No podía evitar reflexionar sobre su decisión hasta que Faris llegó con vino para alegrarlo y darle una noche despreocupada.