—¡Ma! ¿Cómo te sientes? —Ambos hijos se apresuraron hacia su madre y la ayudaron a sentarse. Faris trajo agua y la ayudó a dar un sorbo de la vasija de barro.
Una vez que se estabilizó un poco y su ritmo cardíaco se normalizó, se enfrentó a sus hijos. Los miraban curiosos, con indicios de curiosidad cubriendo sus rostros. Pero se mordían la lengua, sin intentar abrumarla.
—Fue Aylin después de que habló a través de mí. Reveló la verdadera identidad de Cassandra y cómo está conectada con Aylin y Arkiam —Haylia les dijo a sus hijos, su cuerpo temblaba lentamente por la abrumadora experiencia que había pasado.
—Eso tiene mucho sentido. Podemos suponer que a Arkiam no le hizo gracia que Asara se enamorara de un mortal y maldijo a él y a toda su manada —pensó Faris en voz alta, dando golpecitos con la mano en su rodilla doblada.