—Está bien, ¿dónde hablamos? Estaba a punto de bajar a dar un par de vueltas, ¿quieres unirte a mí? —Shen Zhirou alzó su mano hacia Wenyan—. No gracias, todavía estoy sosteniendo un jugo en mi mano. Sígueme.
Hablando del jugo, a Wenyan le pareció un poco extraño. Principalmente porque estar parado en la puerta de alguien con un vaso de jugo a altas horas de la noche era un escenario con el que estaba demasiado familiarizada. Si no lo había visto mal hace un momento, Shen Zhirou debió haber venido desde la dirección de la habitación de Shen Jinghe. Sin embargo, la habitación propia de Zhirou estaba en el tercer piso, mientras que el segundo piso era el dominio de los hermanos, Shen Jingxiu y Shen Jinghe. Así que era imposible que Shen Zhirou simplemente estuviera pasando por aquí.
