—Yang Ruyu cerró la puerta de un portazo y le lanzó a Yang Ruxin una mirada desdeñosa antes de cerrarla.
—Yang Ruxin curvó los labios y luego cerró su puerta también.
—Dentro de la habitación, los más jóvenes tenían los ojos bien abiertos, mirando a Yang Ruxin. Aunque sabían que su hermana mayor era formidable, no esperaban que pudiera ahuyentar a su tía tan fácilmente.
—Yang Ruxin se tocó la nariz. "Bueno..."
—Hermana mayor, nunca pensé... Solías ser tan callada, pero ahora puedes hablar tan bien..." Parecía que las estrellas centelleaban en los ojos de Sanni, "¿Pero ya no le tienes miedo a nuestra tía? Antes ni siquiera te atrevías a levantar la cabeza cuando la veías..."
—Antes, no quería rebajarme a su nivel, pero ahora que mamá ha sido tan acosada, ¿cómo no voy a sacar la columna vertebral?" Yang Ruxin le dio una mirada a Sanni. "Si seguimos siendo débiles, ya los habrían desgarrado y devorado hace tiempo..."