—Señora, el Maestro ha enviado un mensaje y la está esperando afuera; nuestro Maestro es realmente considerado —Su Wenyue estaba casi lista para irse cuando escuchó a la sirvienta a su lado susurrarle al oído con una risita.
—La boca de Su Wenyue se curvó en una sonrisa, "Niña, deja de decir tonterías."