—¿De verdad no te vas a enojar si hablo? —preguntó Su Wenyue a Han Yu una vez más, recibiendo de él una mirada alentadora.
—Sikong Ling no es buena persona —es un hipócrita coqueto que especialmente ama coleccionar bellezas. Él... él me tiene malas intenciones —Su Wenyue habló mientras observaba cuidadosamente la expresión de Han Yu. Al terminar de hablar, la cara de Han Yu traicionó un feroz sentido de posesión, pero no había descontento dirigido hacia ella, lo cual le tranquilizó un poco.
—Cualquiera que mire con deseo a una mujer embarazada claramente tiene un carácter defectuoso. Es solo por su rostro apuesto y su respetable procedencia que tal ser despreciable se ha salvado de ser golpeado hasta la muerte en las calles.