11 PM.
Tang Shu apagó la transmisión en vivo y después de preparar las veinte cajitas listas para ser enviadas, revisó la parte administrativa para ver la cantidad de propinas recibidas con un dejo de anticipación.
[Propinas: 114596.5]
¿Eh?
Realmente se duplicó desde la última vez. ¿El aumento fue tan rápido?
El habitual gesto sereno en los ojos de Tang Shu de repente se transformó en una sonrisa, sus manos ya no dolían, y sus párpados dejaron de luchar, revitalizados.
Y en ese momento, como era de esperarse, llamó el Presidente Wang.
—Señorita Tang, ¿está ocupada en este momento? —preguntó.
—No, no lo estoy, Presidente Wang. Adelante, por favor.