No solo Wang Zhengguo estaba abrumado de gratitud, sino que Feng Qingxue también se sintió sorprendentemente aliviada al escuchar que Wang Jiao tenía amnesia.
Su tío y tía la trataban a ella y a su hermana muy bien, mucho mejor de lo que lo hicieron sus padres fallecidos. Realmente no quería que la pareja de ancianos se encontrara en una situación difícil o albergara algún resentimiento por culpa de ella y de Wang Jiao.