PUNTO DE VISTA DE VALENCIA
—¿Y? —Lo miré con esperanza a Carl en cuanto entró en la casa.
—¿Y? —Me preguntó de vuelta, y rodé los ojos.
Claramente sabía de qué estaba hablando, pero estaba actuando naívamente a propósito.
—Vamos —lo miré con seriedad.
Él me miró mientras yo lo seguía adentro de la casa como una niñita antes de suspirar.
—No dijo mucho, honestamente. Solo me dijo que necesito permanecer cerca de ti y —hizo una pausa dramática.
—¿Y? —Caminé tras él, pero en lugar de decir algo, sacó su teléfono.
Pensé que estaba a punto de mostrarme alguna foto o video o algún dato que pudiera ayudarme, pero cuando comenzó a reproducir canciones, lo miré confundida.
—Qué —empecé, pero antes de que pudiera completar mi frase, Carl tomó mi mano y me hizo dar vueltas, sonriéndome con timidez.
—Dijo que debería hacerte feliz —Carl me guiñó un ojo.