Recuerden seguir mi otra novela: ["Una secta llena de jugadores. ¿Estás loco?"]
y dejen sus piedras de poder ya que ayudan mucho.
---------------------------------------
Hoy estábamos todos esperando fuera del castillo bajo el frío de la noche. Aunque no estábamos en invierno, hoy era especialmente fresco.
—¿Pueden apagar eso? —dijo Natasha mientras se acercaba a nosotros, que estábamos alrededor de una pequeña fogata que armamos para mantener el calor.
—Pero, Nat... profesora Flamel, hace frío —dijo Wanda mientras ponía sus manos cerca del fuego.
—¿Acaso quieres que muramos de hipotermia? —dijo Tony molesto mientras acercaba su vara, en cuya punta tenía un malvavisco, al fuego.
—Chicos, traje más chocolates —dijo Fred mientras se acercaba con una sonrisa.
—Y yo las galletas —dijo George, saliendo detrás de su hermano.
—¿Quieres uno, Nat? —pregunté mientras le entregaba un bocadillo a Natasha, quien nos siguió mirando con molestia, pero al final se rindió y terminó tomando uno.
Mientras tanto, los demás Gryffindors alrededor de nosotros también estaban felices asando sus malvaviscos.
—Natasha, se supone que tienes que controlarlos, no unirte a ellos —dijo la abuela Perenelle, apareciendo detrás de Natasha con enojo. Pero cuando miró detrás de mí, su furia aumentó—. ¡Nicolas! ¿Por qué estás ahí también? —dijo molesta al ver al abuelo Nico divirtiéndose con nosotros.
—Jajaja, está bien, abuela. De todas formas, todavía no llegan las otras escuelas —dijo Wanda, defendiendo al abuelo, quien, al ser atrapado, casi se atraganta con su bocadillo.
—Claro, profesora Perenelle, únase a nosotros —dijo Sirius, quien también se encontraba entre los alumnos.
No fue hasta que la voz de la razón se acercó con furia hacia nosotros.
—¡Desarmen esta fiesta ahora mismo y prepárense para recibir a las otras escuelas! —dijo McGonagall mientras nos miraba con furia.
Bajo la queja de algunos alumnos, terminamos apagando el fuego, pero seguimos comiendo los bocadillos, al menos hasta que apareciera la primera escuela.
Por cierto, el profesor Dumbledore también estaba comiendo uno, pero lo ocultó cuando la profesora McGonagall miró en su dirección.
—¿Qué pasa, Harry? ¿Nervioso? —pregunté al ver a Harry más callado de lo normal.
—No. Solo estoy pensando en los fugitivos —dijo Harry seriamente mientras recordaba a los tipos que escaparon, sobre todo a Peter Pettigrew.
—No te preocupes. Seguramente los verás pronto. Es seguro que vendrán por ti —dijo Loki, apareciendo detrás de Harry y asustándolo.
Eso hizo que Harry se viera visiblemente preocupado ahora.
—No le hagas caso, niño —dijo Tony mientras le tocaba el hombro a Harry con una sonrisa.
—¿Entonces crees que no vendrán por mí? —preguntó Harry, calmándose un poco.
—No dije eso. Es seguro que vendrán por ti —dijo Tony, aún sonriendo—, pero estamos nosotros aquí. No te preocupes.
—¡En el cielo viene algo! —dijo un alumno, haciendo que todos nos concentráramos en el punto que se acercaba.
Después de unos segundos, se pudo ver lo que era: un hermoso carruaje llevado por un montón de caballos alados que se dirigían hacia nosotros.
Los caballos alados se llamaban Abraxans, eran enormes, completamente blancos y con un par de majestuosas alas. Según el Diccionario de Bestias, amaban el whisky de malta puro.
Luego de dar una vuelta al estilo de una presentación para presumir, el carruaje descendió hasta aterrizar a unos metros de nosotros.
El cochero bajó rápidamente y se acercó a la puerta del carruaje para abrirla.
De ella descendió una enorme mujer, incluso más alta que Hagrid. No era otra que Madame Maxime, la directora de Beauxbatons.
Dumbledore rápidamente se acercó para darle la bienvenida.
—Profesor Dumbledore —dijo Madame Maxime respetuosamente, con un saludo elegante.
—Madame Maxime —saludó Dumbledore amablemente, con una sonrisa.
—¿Karkarov todavía no ha llegado? —preguntó Madame Maxime, notando la ausencia de la otra escuela.
Justo cuando Dumbledore estaba por responder, un gran movimiento en el lago cercano llamó la atención de todos.
De repente, un gran bote negro emergió desde el fondo del agua como si nada.
—Parece que ya llegó —dijo Dumbledore, esperando pacientemente la llegada del otro director.
Se suponía que sería Igor Karkarov, pero al ver quién estaba al frente de los estudiantes, Dumbledore no podía estar más sorprendido.
Incluso no sabía si sacar su varita y ponerse en guardia, porque el director no era otro que Gellert Grindelwald, quien se acercaba con una sonrisa bastante amistosa.
No solo eso, sino que Grindelwald se veía tan joven que, si alguien dijera que era su hijo, resultaría completamente creíble.
—Albus, cuánto tiempo —dijo Gellert, saludándolo con un apretón de manos, dejando a Dumbledore en completo desconcierto.
—Gellert, ¿qué haces aquí? —preguntó Dumbledore, saliendo de su estupor mientras tomaba su varita dentro de su túnica, sin sacarla para no asustar a los estudiantes.
Al ver el estado defensivo de Albus, Grindelwald sonrió tranquilamente.
—Tranquilo, Albus. La mayoría de mi magia está sellada, como mucho puedo hacer flotar una pluma. Y, sobre todo, tengo un contrato mágico que me permite solo ver el mundo mágico, pero no interferir —dijo Gellert para tranquilizar a Dumbledore.
Dumbledore, al escuchar eso, rápidamente dirigió su mirada hacia Stephen, mientras que Nicolas se acercó por un momento y le susurró algo al oído con una sonrisa bastante traviesa.
Al escuchar lo que dijo Nicolas, Dumbledore se vio visiblemente frustrado y, a la vez, se tranquilizó, mientras Stephen lo saludaba con una sonrisa.
—Suspiro. Es bueno verte otra vez, Gellert —dijo Dumbledore mientras le devolvía el saludo a Grindelwald.
Madame Maxime estaba enterada del nuevo director de Durmstrang, pero ayudó a Stephen a ver la cara de sorpresa de Dumbledore.
—Entonces, ¿entramos? Hace bastante frío —dijo Maxime, interviniendo en el encuentro de los dos hombres.
—Claro —dijo Dumbledore mientras señalaba el camino.
Mientras tanto, los alumnos de Beauxbatons empezaron a bajar del carruaje.
—¿Emocionado, hermanito? —dijo Wanda, mirando a Stephen con una sonrisa burlona.
—Estoy bien —respondió Stephen, intentando demostrar que estaba tranquilo.
—Oh, ¿de verdad? —sonó una voz detrás de ellos, sorprendiendo a varios alumnos.
—Ella es hermosa —dijo uno de los chicos de Gryffindor, mirando a la recién aparecida Fleur, quien había tomado por sorpresa a todos mientras se quitaba una capa de invisibilidad.
—Mierda —dijo Stephen, casi saliendo a correr al ver la cara de enojo de su novia.
—Si das un solo paso, será mejor que no vuelvas —dijo Fleur con una sonrisa que se veía en su rostro, pero no en sus ojos.
Stephen miró a Wanda, intentando comprender el enojo de su novia, pero Wanda solo le devolvió una mirada burlona. En ese instante, Stephen entendió que había sido culpa de ella.
—Sea lo que sea, es culpa de Wanda —dijo Stephen para defenderse, mientras Wanda ponía cara de inocencia y lo miraba como si estuviera siendo inculpada injustamente.
—¿Así que olvidar mi cumpleaños es culpa de Wanda? —preguntó Fleur, mirando fijamente a Stephen.
—¿De qué estás hablando? Si te envié… —Stephen se quedó en silencio al recordar que le había pedido a Wanda que enviara el paquete a Fleur, ya que él tuvo que salir por un problema con los fugitivos.
Rápidamente dirigió su mirada a Wanda, quien justo en ese momento sacó una golosina con un empaque familiar. En el paquete que se suponía debía llegar a Fleur, Stephen había llenado una caja de bombones y caramelos que a Fleur le encantaban.
Entonces, se dio cuenta de por qué siempre había empaques tirados alrededor de Wanda: ella había estado comiendo la caja de regalo de Fleur.
—Parece que tenemos que hablar —dijo Fleur mientras se llevaba a rastras a Stephen bajo la mirada de todos. Stephen simplemente la siguió, abatido, sabiendo que era su culpa por no asegurarse de que el paquete llegara.
—Jajaja —se rió Wanda, satisfecha de que su plan malvado hubiera funcionado, ya que era su venganza porque Stephen la había llamado gorda repetidas veces.
—Parece que tú y yo también tenemos que hablar, Wanda —dijo Daphne, mirándola seriamente al darse cuenta de lo que había hecho—. Intervenir en una pareja para hacer una broma no es nada bueno.
—¿Qué? —dijo Wanda, mirando a Daphne con miedo mientras también era llevada a rastras.
—¿Viste, Harry? Nunca te enamores —dijo Tony, observando cómo sus hermanos desaparecían.
Mientras tanto, bajo el comando de McGonagall, todos los alumnos volvieron a entrar al castillo y se dirigieron hacia el comedor.
Cuando todos estuvieron acomodados en sus asientos, Dumbledore tenía que presentar oficialmente a las escuelas invitadas, las cuales harían una presentación.
—Por ahora, demos la bienvenida a los alumnos de Beauxbatons y a su directora, Madame Maxime —dijo Dumbledore mientras se abrían las puertas del comedor.
Las alumnas tomaron la delantera, haciendo un suave gesto de saludo hacia los lados mientras se acercaban al podio. Varias bailarinas realizaron una presentación que dejó encantados a los alumnos, sobre todo a los muchachos.
Al terminar la presentación, todos los alumnos se levantaron para dar un fuerte aplauso con emoción, mientras que las mujeres de Hogwarts simplemente aplaudían sin mucho entusiasmo y miraban con molestia a los muchachos.
Luego, Madame Maxime saludó nuevamente a Dumbledore y a los demás profesores antes de sentarse en una silla especialmente colocada al lado de Dumbledore.
Dumbledore levantó las manos para calmar a todos y presentó a la escuela de Durmstrang.
—Ahora, nuestros amigos del norte. Recibamos a los orgullosos hijos de Durmstrang y a su director… Gellert Grindelwald —dijo Dumbledore, deteniéndose un segundo al mencionar el nombre del director.
Tras la presentación, los alumnos de Durmstrang entraron con orgullo, golpeando grandes varas contra el suelo, haciendo que chispas aparecieran en sus pies. Luego, corrieron hacia el podio y realizaron un baile parecido al break dance, escupiendo fuego en una presentación mucho más llamativa que la de Beauxbatons.
Para finalizar, entró Viktor Krum con seriedad y pasos firmes, sin mirar a nadie, mientras los alumnos —sobre todo Ron— estaban emocionados de verlo.
Grindelwald entró tranquilamente y, en vez de dirigirse hacia Dumbledore, se acercó directamente a la mesa de Slytherin bajo la mirada atenta de todos, especialmente de Dumbledore.
—Mis amados hijos, ¿cómo están? —dijo al ver a Loki y a Tony, quien estaba sentado junto a su hermano, ya que sabía que su padre haría algo así.
A los alumnos de Slytherin no les molestó su presencia, ya que sus padres les habían enviado cartas pidiéndoles que nunca molestaran a los hermanos Grindelwald.
—Hola, viejo. Te ves bien —saludó Tony tranquilamente.
Loki asintió hacia Gellert a modo de saludo.
—Aunque me gustaría que fueran a Durmstrang, parece que Hogwarts será más divertido, sobre todo este año —dijo Grindelwald mientras golpeaba los hombros de ambos y luego se dirigía nuevamente hacia Dumbledore.
Mientras tanto, los Slytherin no dijeron ni una palabra frente a Grindelwald, pero lo miraban con ojos de fanáticos. En especial, sus miradas se dirigieron a sus hijos.
—Ese anciano lo hizo a propósito —dijo Tony, molesto, mientras se marchaba nuevamente a su lugar en Ravenclaw. No le interesaba ser el centro de atención, por lo que Loki se sintió molesto de que lo dejara solo.
Gellert se acercó a los profesores con una sonrisa amable y dijo:
—Gracias por cuidar de mis hijos… y de sus hermanos —añadió, mirando también a Nicolas y Perenelle.
Varios profesores se sintieron un poco cohibidos. Aunque Grindelwald no podía usar su magia al 100%, su aura de poder todavía se podía sentir.
—No te preocupes. Después de todo, ahora también son parte de mi familia —respondió Perenelle tranquilamente, sin inmutarse y mostrando un aura aún más poderosa que la de Grindelwald.
—Jajaja, eso es bueno —dijo Grindelwald mientras se sentaba en su silla al otro lado de Dumbledore.
Dumbledore dio la señal para que la comida apareciera, mostrando platos de los otros países.
Mientras que los alumnos de Beauxbatons se mezclaron con los de Hogwarts, los de Durmstrang prefirieron sentarse todos con los Slytherin.
----------------------------------------------
Recuerden que los capítulos de esta novelas se subiran antes en mi patre.on/YoDarki por ahora 1 cap gratis avanzado recuerden seguirlo