Mientras Yan Ling estaba ocupada salvando vidas en la sala de operaciones, Qi Yunjue y Qi Tiantian, fuera de la sala de operaciones, la observaban con expresiones serias.
Qi Tiantian estaba algo inquieta —Papá, Mamá definitivamente podrá salvar a esa joven, ¿verdad?
—Sí, ella podrá —La voz del hombre llevaba una frialdad, pero firme seguridad.
Qi Tiantian se sintió algo tranquilizada, su pequeña mano apretando fuertemente la de su padre, sus ojos continuamente fijos en la luz de la sala de operaciones.
Debido a la espera, el tiempo parecía arrastrarse.
Los padres de la pequeña niña también estaban de pie fuera de la sala de operaciones, esperando ansiosos.
¡Pero el aura que emanaba el hombre de corazón frío era demasiado intimidante!
No se atrevían a acercarse demasiado, caminando solo a unos metros de distancia de la sala de operaciones.
Esta escena fue capturada por alguien con una agenda, quien secretamente tomó una foto y la subió a internet.