Unos días más tarde, Selene retomó su rol en Sombras de engaño. Sus colegas la recibieron con buenos deseos, flores y chismes sobre el percance de Michelle en la entrega de premios. También surgieron preguntas sobre quién había intentado matarla.
Pero Selene fingió no tener idea de quién podría ser, y se preguntó con ellos.
Sus próximas escenas, que incluían algunas acrobacias, serían realizadas por una doble de acción, ya que su herida en el abdomen no había sanado completamente.
Selene caminó hacia su camerino y encontró a Natalie y Allison esperándola como de costumbre. Allison parecía más cansada de lo habitual.
—¿Estás bien, Allison? Te ves cansada. ¿Quieres ir a casa a descansar? —preguntó Selene con un tono teñido de preocupación.
—No hay necesidad, señora. Estoy bien. Un poco cansada, pero estoy bien —respondió Allison.