— Benedict Alden Vortex. Era el nombre de mi hermano menor. Lleva su nombre con gran orgullo.
"Así que ese es mi nuevo nombre," pensé.
No puedo negar la gran similitud con mi nombre anterior. Pero, en realidad, no me quejo; suena bastante bien.
— ¡Huahga!
"Oh, parece que este cuerpo de bebé reacciona instintivamente a cómo me siento."
Una pequeña sonrisa apareció en mi rostro. Aunque soy consciente de mi entorno, sigo siendo un bebé que actúa de manera instintiva. No sé si es bueno o malo, ya que tardaría un tiempo antes de poder moverme por mi cuenta. Es una pena que no pudiera cobrar conciencia de repente cuando fuera un poco mayor. Tengo mucha curiosidad sobre este nuevo mundo, así que tendré que buscar una manera para explorar.
— Parece que al joven maestro le ha gustado el nombre.
El mayordomo viejo habló por primera vez. Se acercó a mí mientras mi padre me pasaba a sus brazos. El mayordomo me mecía con tal habilidad que mi cuerpo empezó a sentirse adormilado.
— ¡Mira, se está durmiendo! William, ¿cómo es que...?
La mujer sirvienta habló en voz alta, algo que mis sensibles oídos no pudieron soportar, el cual en mi rostro hizo una mueca por esto. La mujer recibió un leve golpe del hombre guerrero, quien hizo un gesto para que guardara silencio. La mujer comenzó a quejarse en murmullos.
— Antony, ¿por qué fue eso?
La mujer habló en voz baja, mientras se frotaba la cabeza. El hombre suspiró cansado antes de responder.
— Porque gritas demasiado, Marie.
El hombre contestó de manera brusca, en voz baja, mientras dirigía su mirada hacia mí. Yo, por mi parte, no podía mantenerme despierto; maldita sea. No pensé que mecer a un bebé podría ser tan eficaz para que se durmiera.
No pude más y finalmente caí dormido.
*¡DING!*
[Proceso Finalizado: Usuario Reencarnado correctamente]
"¿Qué es esto?"
Me encontraba en un lugar oscuro. Muy parecido al lugar donde llegue después de morir. Miraba curioso una pantalla flotante. La miré unos segundos y me di cuenta de lo que habría sucedido.
¡Habría reencarnado!
Bueno eso ya lo sabría. Pero me di cuenta de que seguí lo mismo que hacen en las novelas de reencarnación que leía.
Aunque el orden de factores fue ligeramente distinto ¡El resultado es el mismo! y ahora tengo un sistema.
*¡DING!*
[Proceso Inicializando: Descargando Meta-Data para el Sistema]
Una barra de carga apareció ante mí. Parecía que tardaría un rato, así que decidí aprovechar el momento para reflexionar... A mi mente llegaron imágenes de las personas a mi alrededor.
— Supongo que ahora tengo una nueva familia...
Al decir eso, un sentimiento de tristeza me invadió. No siento odio hacia ellos, pero tampoco tengo ningún apego. ¿No se supone que es normal tener sentimientos cercanos con la familia?
No lo sé.
Pero sería difícil olvidar que aún tengo una familia que probablemente ahora esté llorando por mi muerte. Es difícil ignorar, mi nueva madre, con esa extraña calidez maternal. Pero no puedo ignorar a mi mamá original, la que conozco y me crio.
Tal vez no tengo que olvidarlos.
Una vez leí que las personas importantes del pasado no tienen que ser olvidadas. Pero también hay que abrir el corazón y dejar entrar a nuevas personas importantes.
.
.
Suspiro
— No es tan sencillo de aceptar...
Suspiré pesadamente. Sin duda, no puedo superar que dejé inesperadamente a mi verdadera familia. A mi mente llegó una imagen que me hervía la sangre: aquella sonrisa del taxista.
— Maldito bastardo psicópata...
Apreté los dientes. Todo es culpa de ese taxista, estaba enojado, si no fuera por el no estaría aquí... espera, si yo reencarné...
¿Él no debería haber reencarnado también?
Ambos morimos en el mismo accidente, al mismo momento. Si yo pude reencarnar, nada me dice que él no haya podido hacerlo también.
— ¡Mierda!
Sentí una especie de presión sobre mis hombros. El taxista es un maldito psicópata; si él recibiera el poder de un sistema, solo podría haber caos. Según recuerdo de su conversación es un anarquista. Puede que muchos mueran en el futuro
Aparte de fracasado, se volvería un narcisista con razones para serlo. Joder, ¿qué puedo hacer?
Mi mente estaba a mil revoluciones. No quería que él viviera una vida de gloria, no con su mente dañada. No después de lo que me hizo pasar ese bastardo.
Venganza.
Un fuerte sentimiento de venganza empezó a surgir como una llama ardiente dentro de mí. Una llama incontrolable que buscaba dar caza a su presa. No podría ignorar este hecho. Nunca antes habría tomado represalias tan brutalmente como ahora.
¿Aparte no es un mal menor por un bien mayor? La cantidad que salvaría seria grande.
*¡DING!*
[Proceso Finalizado: Descarga completada. Instalando Sistema]
Un rostro serio se formó en mi cara.
— No sé dónde estes, pero si has reencarnado me asegurare de tomar venganza