[A morir, el ángel se desvanece, la magia que tenía atrapada a la elfa.]
- ¿Estás bien, niña? No estás lastimada.
[Catter intenta caminar hacia donde se encontraba la niña elfa, pero al no tener más fuerzas, se cae al piso desmayado, boca abajo. El caballero, al ver que Catter cae desmayado, va rápido a atraparlo.]
- Caballero: Oye, oye, héroe Catter, ¿te encuentras bien? Responde, responde.
[Catter comienza a escuchar su propia voz, como si él mismo se estuviera susurrando al oído.]
¿¿??: Catter, ¿cuánto tiempo? Eeeh, ¿no te acuerdas de mí? Vamos, sobreviviste por suerte, solo porque ese ángel no quería pelear, ¿no? Me das lástima, vamos, despierta. ¿No era que querías ser... ¿fuerte? Vamos, despierta. Sabes que me necesitas. Nuestros padres nos tenían miedo, ellos no nos querían, por eso pusieron una gema en nuestro corazón y ahora no podemos utilizar nuestro poder, Catter. ¿Por qué no nos volvemos a unir y ser uno solo como antes? ¡Vamos, dime que sí! Yo también quiero venganza. No perdonaré a esos dioses. Vamos, Catter...
[Catter, al abrir los ojos, mira que se encuentra acostado al lado de un árbol. Ve la cara de la elfa mirándolo fijamente. Ella le acaricia la cabeza, llorando desconsoladamente, y se abalanza hacia Catter, abrazándolo fuertemente.]
- Oye, ya pasó, cálmate...
[Catter le comienza a acariciar la cabeza a la niña elfa.]
- Dime, ¿cómo te llamas?
- ¿¿??: Yo me llamo Elena.
- Ok, Elena, tranquila. Dime, ¿dónde vives y dónde está tu familia?
- Elena: Yo no sé. Mi padre y yo fuimos expulsados de nuestro pueblo y mi padre... lo... lo mataron intentando protegerme de unos monstruos. Me quedé sola desde entonces, pero gracias por ayudarme.
[Elena se aferraba a la camisa de Catter, no quería soltarlo para nada. Entonces, Catter la carga y la sube en su espalda para poder llevarla. Catter se dirige hacia donde está el caballero.]
- Oye, caballero, ¿hacia dónde nos dirigimos ahora?
- Vamos a donde están tus hermanos esperándonos y después vayamos al reino Lumeria.
- Bueno, vamos entonces. Vamos, Elena.
- Elena: Sí, eee... Catter, ¿te puedo llamar hermano?
- (Tal vez piensa que la voy a abandonar después de todo lo que ha pasado.) Sí, me puedes decir como tú quieras, hermanita.
[Elena le sonríe felizmente a Catter y lo abraza fuertemente. Catter y el caballero, después de caminar un buen rato, por fin se encuentran con los otros héroes que los estaban esperando. Después de tanto caminar, llegaron a su destino.]
- Caballero: Mira, Catter, ese de allá es el reino de Lumeria.
- Es hermoso...