Rafael miró instintivamente a Hera, esperando su decisión, listo para seguir su ejemplo. Sentía que Hera tenía la clave para resolver el problema. Por primera vez, percibió un aura de autoridad emanando de ella, como si estuviera arraigado en su ser. Hera exudaba una poderosa presencia, como una reina dictando su veredicto a sus súbditos.
Gerald y Rafael parecían dos perros guardianes, con toda su atención puesta en Hera mientras esperaban sus palabras, aguantando la respiración en anticipación. Hera finalmente habló —Dado que Rafael ya mantiene a su hermana confinada y bajo vigilancia constante, continuemos con la investigación para descubrir toda la historia. Para obtener la imagen completa, sugiero que nos pongamos en contacto con personas involucradas en el negocio subterráneo. Pueden tener una mejor comprensión o conexión con este grupo de criminales que nosotros. Solo entonces podremos reunir las pruebas que necesitamos.