Incierta de cómo se desarrollaría la situación ahora que el quinto protagonista masculino estaba confrontando tanto a la segunda protagonista femenina como a la protagonista femenina original, Hera dudó en involucrarse más. Sin embargo, una parte de ella estaba intrigada, ansiosa por presenciar el resultado de esta confrontación desde un costado.
No es que quisiera abandonar a Xavier después de que él se levantara en su defensa, ella entendía que carecía del aura protectora de un protagonista masculino como él. A diferencia de Xavier, que poseía el halo del quinto protagonista masculino, Hera se sentía más como un peón prescindible en este escenario, sin ninguna protección inherente contra la influencia de otros protagonistas como Minerva y Alice. Por lo tanto, su único recurso era buscar refugio detrás del protagonista masculino y confiar en sus respectivos halos para navegar la situación.