—Hermana, ¿vamos a ir a otro picnic con todos? —preguntó Bry, echando un vistazo al contenedor que llevaba Hera mientras caminaban hacia su nueva ubicación.
Hera miró a Bry mientras continuaban adelante. —¿Por qué preguntas?
—Llevas comida contigo, ¿no es para compartirla con todos como nuestro picnic de ayer? —explicó Bry, pateando un guijarro en el camino.
La radiante sonrisa de Hera se desvaneció, sustituida por una expresión sombría y triste mientras sus ojos se empañaban levemente. —Sobre eso, Bry... eh... —Hera luchó por continuar, su dificultad evidente, lo que hizo que Bry levantara la mirada hacia su rostro. Se sorprendió al verla tan profundamente triste.
Él tartamudeó con sus palabras. —Eh... Hermana, ¿qué pasa? —Ante la visión de Hera al borde de las lágrimas, Bry sintió una punzada de preocupación.