Hera se mordió el labio, su mirada se encontró con el ceño fruncido y resentido de Dave mientras él presionaba su cara contra la ventana, intentando mirar dentro del coche. Zhane soltó una risotada sonora, liberando lentamente a Hera de su abrazo. A pesar de su actitud divertida, una chispa de preocupación cruzó por sus ojos al darse cuenta de que habían estado en esa posición por bastante tiempo. Estaba ansioso por comprobar si Hera estaba cómoda y si su cintura estaba bien.
Tan pronto como Hera se movió, un dolor agudo recorrió su cintura, haciéndola gritar de incomodidad cuando intentó acomodarse de nuevo en su asiento. —¡Ah! Su mano instintivamente alcanzó el lugar en su espalda baja donde sentía la tensión, deteniendo su movimiento a mitad del camino mientras intentaba aliviar el dolor.