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Sang Qianqian se dio cuenta de que su expresión era extraña. —¿Qué te pasa, Hermano?
Sang Minglang negó con la cabeza, pero su mirada estaba fija en Ruan Xiaoshuang, quien era sostenida por Song Yu mientras caminaba lentamente hacia delante. Sus ojos eran profundos y complicados.
Sang Minglang comió en silencio, casi sin hablar, solo de vez en cuando miraba a Ruan Xiaoshuang pensativamente.
Por otro lado, Song Yu estaba de buen humor y habló mucho sobre Ruan Xiaoshuang. Por ejemplo, habló de cómo la salvó y cómo pasaron de ser desconocidos a conocidos.
—De hecho, Shuangshuang ya conocía mis intenciones.
Song Yu miró a Ruan Xiaoshuang con una sonrisa. —Ella siempre rechaza mis sentimientos, diciendo que su incapacidad para ver solo me causaría problemas. Ahora que sus ojos pronto se recuperarán, ya no puede encontrar una razón para rechazarme.
Sang Minglang miró a Ruan Xiaoshuang con significado. —Entonces, ¿todavía no son marido y mujer?
