Su Jing guardó silencio por un momento. —Wan wan, la estación de policía acaba de llamarme. Dijeron que nuestra evidencia es insuficiente y que tendrán que revisar este caso.
Eso significaba que la policía no tenía motivo para arrestarla.
Su Wan no dijo nada por un tiempo.
—Wan wan, no te desanimes —al ver que no había respuesta, Su Jing pensó que este asunto había afectado a Su Wan y rápidamente la consoló—. Quizás pasamos por alto algo y eso le dio a Jiang Xin una oportunidad, pero... Wan wan, sospecho que alguien está ayudando a Jiang Xin.
Su Wan se puso nerviosa inmediatamente. Preguntó rápidamente:
—¿Quién es?
De acuerdo con su comprensión de Jiang Xin y su atención a la Corporación Jiang estos últimos días, era imposible que Jiang Xin pensara en algo para refutar su evidencia en tan poco tiempo. Por lo tanto, cuando Su Jing expresó su suposición, ella lo creyó inmediatamente.
