Jiang Xin reaccionó y su mente estaba en blanco, pero aún así no quería rendirse. —Abuelo, ¿fue Jing Chen quien te dio la idea? ¿Encontró a un hombre como Kang Xu porque no quería casarse conmigo, verdad? Pero abuelo, ¿no sueles consentirme más que a nadie? Créeme, ¿de acuerdo? Jing Chen y yo definitivamente seremos muy felices. ¡Solo cumple mi deseo!
Jiang Xin se llevó las manos al pecho, dolorida, y casi se arrodilló.
Sin embargo, Jiang Tian permaneció impasible, como si estuviera decidido.
Sin embargo, Jiang Tian también sufría en su corazón. Tras la muerte de su hijo y su nuera, su nieta era la única que quedaba. Si seguía vivo, podría seguir consintiéndola, pero no le quedaba mucho tiempo.
—Xinxin, abuelo ha tomado una decisión esta vez. He considerado cuidadosamente a este Kang Xu. ¡Tienes que casarte con él! —Jiang Tian reprimió el dolor en su corazón y su voz tembló