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Penélope se sintió increíblemente aliviada tras escuchar eso de Violeta. ¡Fue solo porque Violeta subestimó a Samantha que su plan falló, a pesar de que Violeta siempre había tenido éxito en todos sus empeños! Penélope admiraba muchísimo a su madre.
—¿Cuál es tu plan, mamita? —preguntó Penélope.
Violeta curvó sus labios y susurró un par de palabras al oído de Penélope.
Después de escuchar a Penélope, no pudo evitar sonreír y alabar montones a su madre. «¡Eres realmente inteligente, mamita! Si hacemos esto, podremos matar dos pájaros de un tiro. ¡Samantha se arruinará y podremos mantener nuestras manos limpias!»
—Por supuesto —respondió Violeta, levantando su barbilla orgullosa—. Samantha es una mujer deshonrada y no vale la pena que me moleste en lidiar con ella personalmente.
—Es solo que... —Penélope frunció el ceño antes de continuar titubeante—. ¿Estás segura de que la persona que mencionaste estará dispuesta a hacer tal cosa?