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Kong Xia vio que Yue Qing había salido durante tanto tiempo y no había regresado, por lo que estaba un poco preocupada. Basándose en su conocimiento de su hijo, Kong Xia sentía que Yue Qing les estaba ocultando algo.
Por eso, después de que Yue Ji se quedó dormida, salió a buscar a Yue Qing. Kong Xia había escuchado de la enfermera que Yue Qing había venido por este camino. Sin embargo, cuando abrió la puerta, ¡no esperaba ver a Jiang Li!
Pensando que había visto mal, Kong Xia miró fijamente a Jiang Li durante mucho tiempo hasta que Jiang Li dijo suavemente:
—Tía Xia. Solo entonces Kong Xia volvió en sí.
Independientemente de lo que acababa de suceder, Kong Xia apartó a Yue Qing, que estaba bloqueando el camino, y tomó la mano de Jiang Li directamente. Dijo descontenta:
—¿Por qué me llamas tía? ¿De verdad ya no me quieres como tu madre?
