Jiang Man sentía que sus padres definitivamente la elogiarían por resolver el gran problema de la Corporación Jiang cuando regresara a casa. En cuanto a las acciones de Jiang Li en la Corporación Jiang, cuando Fu Yunze tomara el control de la empresa, no habría nada que Jiang Li pudiera hacer.
Cuanto más lo pensaba, más feliz se sentía. Jiang Man no pudo evitar reír a carcajadas.
Cuando Fu Yunze vio a Jiang Man así, aún sentía un poco de disgusto en su corazón.
—Apúrate y arréglate. El presidente Jiang y los demás dijeron que quieren reunirse —dijo él.
—¿Qué? —preguntó Jiang Man.
Jiang Man realmente no quería ir así. ¿No sería muy embarazoso si todos la veían así? Sin embargo, también le preocupaba que Fu Yunze actuara precipitadamente afuera y dejara que alguna mujer se metiera en su cama.