En el último examen final del primer año, alguien además de Qiao Nan podría ocupar el primer lugar en el nivel.
Qiao Nan podría ser sobresaliente, pero solo lo era entre los estudiantes de primer año. Shi Qing, que acababa de transferirse a su escuela, era diferente. Era muy superior a los estudiantes de su mismo nivel y podía competir con los estudiantes de tercer año por los primeros tres puestos. Sus habilidades estaban a años luz de distancia.
—Xiao Qiao, no te presiones demasiado. Solo es el primer lugar en el nivel. No hay nada tan grandioso en ello. Solo tenemos que hacer lo mejor posible. No importa si terminamos en el primer o segundo lugar —la expresión de Zhu Baoguo cambió. No podía esperar para tratar a Shi Qing como un balón de fútbol y patearla fuera de la primera clase del primer año y de la Escuela Secundaria Ping Cheng.
