Un mundo en agonía, un universo desapareciendo.
Otro más dentro de la infinidad que estaba al tanto de su último hilo de vida mientras eran decorados lentamente por un ambiente peculiar.
Era el proyecto "Alep" que para apenas quien pudiera clasificarse como una existencia viva era solo un juego más, había pasado mucho que había intentado crear algo que no pudiera ayudarlo inmediatamente contra lo que venia.
Sus planes eran perfectos y sus logros también lo fueron en tal escala, pero no podría hacer nada contra lo que que sucederá.
La muerte del todo.
Curiosamente era una opción pero no esperaba que simplemente no se pueda hacer nada, no era tan simple como la muerte térmica de algo...
...era la muerte energética de todo sistema haciendo que nada vuelva a ocurrir y el vacío consuma todo, ni los conceptos se salvarán cuando en una eternidad incluso su existencia sea reducida al vacío.
Ahora en sus últimos momentos solo acechaba en el vacío mas grande dónde solo ella brillaba, un brillo que se atenuaba cuando una calidez surgida, otra simulación termino.
No había esperanza, había fallado otra vez.
Esperanza, era un concepto extraño para un ser que nunca la había tenido pero la comprendía perfectamente con incontables vidas que se dieron por ella, pero...¿No era lógico?
Para el lo era, solo ocurrio, eso bastaba y no había más curso de acción que la más probable a la vez como la más eficiente.
Miro otra vez las simulaciones: Eran planetas sin color donde solo habia árboles por todo el mundo, sin diversidad o acción mas alla que la monotonía mortifera de su simulacion. Personas, iban a sus casas siguiendo comandos mientras repitian palabras vacías sin alma, otras tenían a veces un brillo en sus ojos y en un intento desesperado miraban el cielo, pronto se calmarían para seguir caminando como autómatas.
¿Por qué haría una simulación tan imperfecta?, su mundo unidimencional en cuanto a vida emocional se diferencia de la conmocion que se contraeria a vivir de esa forma, sus reacciones y esperanzas huecas, era un mundo hueco.
El molde perfecto para una criatura hueca, era una creación perfecta para los parámetros que se establecía,era solo uno de las incontables.
Fue un zumbido estridente donde noto un brillo carmesí a lo lejos, sabía que era el momento.
El plan más grande de todos y el último que pueda hacer con todo su poder tendría que funcionar o simplente...pasaría algo, nunca pudo entender como una existencia paradojica como los terrenos del [Caos] y el [Orden] pudieran existir.
Por una parte el [Caos] era una amalgama de existencias puras en conjunto que corrompían todo lo que ven, el [Orden] fue la manifestación de la nada absoluta, un régimen extremo de lo que es el concepto del orden puro al existir como la nada indestructible que corroía el todo.
Y entonces, cuando el [Orden] y el [Caos] se encontraron...algo paso.
Con cierta lentitud se acercó al brillo que cubrió todo.
Naturalmente empezó a ver miles de visiones, miles de cálculos que miraban un brillo extraño en el interior de cada ser que alguna vez existio, un calor que jamas volvera a sentir, era el [Fin] y su maniferacion rota dentro de una singularidad contenida, un bello y bizarro espectáculo.
Fueron los pulsos alrededor de la esfera junto a la perdida de funciones que la regresaron a la realidad.
Por un segundo mire al horizonte mientras la luz alumbraba todo el espacio con un color cálido que era amarillo.
Solo tenía que soportar hasta que lo que sea que llego desde las grietas del [Fin] no logre entrar.
Por ahora solo las creaciones huecas podrian jugar un papel importante, el mío era contener la aberración física que habia creado para salir de "esta caja de cartón".
¿Podría existir algo más allá que las reglas y conceptos?, era imposible, pero no había otra forma de saberlo que no haya intentado, solo podia intentar romper todo y esperar sobrevivir.
...
Dolor, electricidad, ¿Quien soy yo?
"Abre los ojos", una voz interna me guio mientras un extraño sonido estridente para mis sentidos destruía mi paciencia.
Varias voces se juntaban en una cacofonia de dimensiones ridículas, parecían lentas o rápidas, si no prestaba atención juraría que formaban estructuras incomprensibles e ilusorias.
Solo fueron algunos segundos donde se manifestó el pico de dolor y luego hubo algunas instrucciones vitales.
Primero antes que nada, intentó dislumbrar su situación actual. Alep dislumbro su ambiente y se encontró a si mismo dentro de una cueva.
Algo estaba mal, solo tuvo que mirar su cuerpo para notar que esta era una mano esqueletica dónde una sostenía una espada.
No sé molesto en seguir mirando más de su cuerpo debido a que extrañamente tenía una percepción muy reducida pero bastante completa en lo que respecta a otros seres vivos, seguro tenía que ver con que su cuerpo no tenía órganos o fuente de alimentación clara. Si tuviera que describirlo lo compararía a estar en el estado medio entre estar despierto o dormido además de que su visión de túnel era extraña.
Lo categorizo rápidamente como un problema debido a que perdía fácilmente la concentración y su visión de túnel se complementaba con una vista periférica repleta de imágenes irreales, pero aún seguía caminando entre las ruinas de una civilizacion con algunas antorchas colocadas alrededor.
"Carne", un pensamiento recurrente azotó otra vez a su mente mientras tanto sus piernas se movían a su ritmo más rápido aunque se astillaban de vez en cuando cuando chocaba con fuerza con algunas paredes.
No encontró nada, ni un ruido dentro de toda una caverna, todo el sitio parecía estar desolado, carente de todo sonido.
Inconscientemente Alep tocó una pared y comprobó que no estaba sordo. Era aún más extraño, no había encontrado rastros de nada y su vista no ayudaba mucho.
Trancurian los días y el seguía caminando mientras caminaba por una cueva que estaba derrumbada, lo había descubierto hace unas horas y solo pudo pensar en acabar consigo mismo pues no seria su final.
Pensó bastante...pero desistió por una razón: No dominaba su habilidad principal.
Quería ver hasta donde llegaban sus límites de transmutación y está era una oportunidad para templar su mente que apenas podría seguir el ritmo a una conciencia despierta.
"Me estoy destrozando...tal vez tenga un uso después de todo", tomaba en sus manos un poco de polvo, era especial ya que provenían de el mismo. Planeaba transformar su cuerpo en uno más versátil, después de todo era lo maximo que podía hacer ahora mismo.
Con algunas ideas decentes en su opinión, busco un cráter o un sitio con algo de profundidad y encontró lo que parecía ser un antiguo charco de agua, ahora estaba seco. Era perfecto, puso su cuerpo en aquel hueco mientras miraba como su cuerpo pulsaba, era una ilusión debido a que principalmente su cuerpo era inmutable en comparación con la carne.
Cadas pocas horas su cuerpo se fue apagando mientras plantas sobresalían de algunos de sus restos, fue complicado encontras una o siquiera replicarla, ahora mismo solo perseguía una esperanza ilusoria de que podría crear un cuerpo vegetal.
Por suerte las piedras al menos podrían sustentar un poco las necesidades de las plantas, aunque el problema persistía. Alep en un punto se desprendió de sus esperanzas cuando noto que las plantas eran demasiado débiles, "Esperaba que la energía de este sitio interactuara con las plantas...parece que solo moriré".
Entonces cambio de planes, empezó a experimentar con su cuerpo y las plantas, principalmente quería generar organismos más complejos y simples pero su habilidad tenía un límite, debía ser matemáticamente perfecto para llegar al siguiente paso o adquirir habilidades suplementarias muy particulares.
Alep miro su cuerpo desde una calavera humana, un charco rojizo dónde algunas lianas se formaban pero se marchitaban, algunas serás rojizas pero incapaz de usarlas, todo estaba creciendo sin su voluntad, esencialmente se podían dividir en: Enredaderas, servirían como ligamentos, las setas se convertirían en células madre, el líquido rojizo era una sopa de bacterias junto a algunos organismos que el introdujo que sevirian para alimentar su cuerpo pero fallo cuando estos empezaron a descomponer el liquido.
El gas también seria útil pero necesitaba lo primordial y el se había quedado con pocas formas de interactuar con el mundo. Era una mano unida a una calavera destruida, lentamente cerro sus ojos y al final terminó doblegandose al infame sobreesfuerzo que hizo cuando sus sentidos rozaban un paso de la irrealidad, empezaba a olvidar, sordo, ciego, mudo de forma natural, con un sentido bastante carente del tacto apenas con propiocepcion y otros sentidos que no importaba que los tuviera o no, su mente simplemente lo compensaria con un dominio corporal inigualable.
Cerro los ojos y...durmió otra vez.
Pero había algo, extraño, recuerda ir a un sitio vacío encontrarse con varios datos que actuaban como parámetros designados para el, pero todos oscurecidos bajo un fundamento: No los conocía. El no conocía que significaban esencialmente así que solo pudo reconocer algunos como los reflejos, que formaban parte de estadísticas natas, significarían que algunas estadísticas permanecían fijas y se añadirían al siguiente cuerpo en que ingrese pero no de forma directa.
También, existían habilidades que dependían de reglas y la suya [Dominio biológico] era una bastante versátil, pero solo tuvo esa y otra llamada: [Dominio corporal], está era aún mas útil, especialmente para el.
No recuerda nada más aparte de ese espacio oscuro, cerrar los ojos y ahora...sabía que estaba en otro sitio.
Abrió los ojos y noto que su pequeño cuerpo verde estaba descansando en un rincón cerca de una "cueva" muy extensa, a lo lejos distinguía cristales y varias criaturillas semejantes a el.
Cerro otra vez los ojos y sonrió, tenía sangre fluyendo en su cuerpo, no importaba de que raza fuera pues la convertiría a otra más útil, pero tomaría algo de tiempo como biomasa y lo lejos la veía.
En una gran cueva, con ruinas corroidas por el agua como dañadas por las fuerzas de los duendecillos, dónde perduraba la tranquilidad del goteo del agua y algunas inundaciones, bastantes duendes descansaban bajo el yugo de algunos ropajes primitivos
Uno se levanto a hacer sus necesidades perezosamente, se notaba su recién despertar por su andar algo torpe, vagaba por los alrededores cuando termino, trascurian los minutos y en un momento vio a uno de sus compañeros escondido, era Alep quien estaba escondido.
El duende estaba extrañado, pero aún más cuando el otro empezó a correr hacia el. Ante la confusión él chillo con agresividad y al notar la indiferencia del otro, el duende salió corriendo por la confusión, pero basto un segundo y dolor agudo en su cuello para acabar con su mundo dando vueltas, mientras caía un recuerdo extraño lo asalto, le encantaria encontrar agua caliente y dormir en el.
Cuando el escenario terminó para el duende, otro empezaba, en una entrada de la mazmorra, el sonido retumbante de un cristal rompiendose junto a la iluminación de la cueva, en forma de un cristal algo rompió la tranquilidad de la cueva.
Varias pisadas se oían, murmullos incomprensibles para los habitantes era un símbolo de superioridad para los intrusos. Eran 6 personas que extrañamente miraban para todos lados, parece que buscaban a alguien o algo, murmullos que a vista de la mazmorra eran enemigos tal vez fue la razón porque los monstruos de varias zonas dejaron de pelear entre si para dirigirse en hordas hacia la grieta.
...
En otro lado Alep miraba con decepción varios cuerpos amontonados mientras raíces rojas torcian los cuerpos, podía crear cosas a partir de cuanta comprensión tenga de ellas pero era totalmente distinto comprenderlas y crearlas, ahora mismo intentaba crear un cuerpo nuevo pero fallo nuevamente cuando todo colapso por alguna razon.
Teniendo en cuenta que mecánicamente todo el cuerpo era perfecto la respuesta provenía de que la forma de estructuración era errónea junto con la idea.
Negué con la cabeza de forma inconciente.
Se había quedado sin muchos materiales y ahora mismo algo había sucedido, tuve que reagrupar algunos restos útiles pero otros estaban desechos mientras un hedor nauseabundo se propagaba por los alrededores.
"Será útil...¿Son débiles sistémicamente no?", pensaba mientras miraba los cuerpos necroticos de algunos de sus compañeros amontonados.
No había quedado mucho con que trabajar y todo lo que quedaban eran restos orgánicos. De hecho, ahora mismo trabajaba con su mano derecha para intentar sacar algo de provecho de tantos cuerpos.
Empezó a mover rápidamente los ojos, su cuerpo danzaba desenfrenadamente alrededor del charco mientras varios sonidos repulsivos sonaban, varios pseudo-insectos, bacterias e incluso plantas se movían de forma simultanea mientras cristales brillantes cobraban vida cuando se fusionaban con raíces rojas.
El significado de tales acciones se mostraría cuando sumergió su mano en el charco donde raíces rojas se fusionaban, ojos que sobresalían del charco miraban desde todas direcciones hacia la mano, varios apendices desprendían de vez en cuando chispas mientras una fina capa rojiza se formaba frunció el ceño.
"Esto no está funcionando", con rápidos movimientos quito la mano mientras conservaba algo de su integridad física.
Mire al charco mientras se preguntaba, ¿Cómo el esperaba que fuera tan fácil?
El conjunto de cuerpos colapsararon rápidamente convirtiéndose simplemente en cuerpos flotantes sin gracia alguna, en ese momento, Alep arranco algunos "tallos" que sobresalían del charco y los coloco en algunas heridas abiertas.
¿Que había fallado?, una figura sombría se cuestionaba mientras miraba el charco.
Para resumir, el organismo frente a mi se supone que me ayudaría a crear un órgano especial, uno que serviría como un fundamento principal en la deformacion organica en el cuerpo de algo, ahora mismo acaba de fallar y lo unico que quedó fueron los "observadores".
Sin pensarlo mucho hice que los "tallos" tuvieran contacto directo con algunas heridas abiertas realizadas en la espalda.
Alep regreso a su base temporal, el terreno donde estaba más familiarizado para traer algunos insumos a su exploración para el exterior.
Se dirigía al sitio donde habia más destrucción menor en los alrededores, ciertamente tenía que ser destrucción constante y con muchas huellas. En su camino se cruzó con algunos materiales vitales como la biomasa de tipo animal, de vez en cuando agarraba algún que otro insecto interesante y continuo con su procedimiento básico hasta que encontró lo que buscaba.
Una formación peculiar de piedras dónde en el centro que parecía haber sufrido un extraño altercado elemental químico que Alep no reconocía se expuso a sus ojos. ¿Cómo podría entenderlo cuando fue la primera vez que vio semejante extrañeza?, reconoció varios distintivos unicos que dejaban químicos muy alejados de la naturaleza entre si..al manos una organización con que el habia empezado a formar su visión del mundo.
Con cierta cautela se movió alrededor de la grieta, pensó superficialmente en sus opciones y se resigno a ir directamente debido a que no podia crear organismos muy complejos o autonomos, había informacion desconocida en medio que no podía descifrar y el problema era la posible misma generalidad que existiria en situaciones similares, eso era un defecto grande pero un problema para resolver despues.
Patrones, era un concepto fundamental para el debido a que sus creaciones provenían de romper los mismos además de que su aprendizaje entero dependía del mismo, ¿Cómo podía expandirlo?
Alep noto que se acercaba a un territorio inexporado, abstracto y tal extrañeza lo hizo mirar a su alrededor, "¿Los seres de afuera la poseen de forma innata?", pensó en el orden de las cosas e incluso en el orden del...orden.
De un salto entro a la grieta, podría quedarse pero había una razón fundamental por la que no lo hacía.
"No vale la pena", sus últimos pensamientos antes de entrar a la grieta, no valía la pena quedarse cuando el potencial de crecimiento se estancaba, tenía prisa interna, vaga pero existía.
Continente oculto, dentro de algún reino desconocido.
En los bosque más inmensurables que se hayan visto, en las solitarias planicies verdes dónde del horizonte al cielo se refleja una luz inigualable como la luna sanguinaria que se cierne como una cruel expresión enloquecida de un mundo muerto, un legado horripilante que asolaria a todos sus habitantes.
Una insípida presencia mira con temblor los alrededores, Alep no soporto el viaje y se apoyo en un árbol, sus pies estaban demacrados donde su piel chamuscada era una manifestación clara de los probables efectos adversos al viajar dimensionalmente.
Repentinamente su cuerpo dejo de temblar mientras miraba a lo lejos sin expresión alguna, fue siniestro en especial cuando varias indicios señalaban un brutal final para quienes estuvieron aquí antes, miro al cielo mientras parecia captar algo.
Finalmente se dirigió a las luces, mientras un ensordecedor ruido creaba un ambiente familiar a su vista. Se escuchó a la distancia varios gritos en conjunto con explosiones que en parte el reconocía, se parecía a como el se hizo con la pila de cuerpos en aquella cueva.
Miro a lo lejos varias construcciones de piedra, era raro como el sonido que se hacía cuando caminaba por la zona.
Sus pasos continuaban resonando, mientras miraba extrañado la gran cantidad de escombros junto a alguna que otra cosa que puso en su bolso rojizo, repentinamente miro hacia atrás cuando un retumbante sonido junto a un sismo lo hace caer, Alep miro rápidamete hacia el origen del ruido y fue tal su sorpresa que cuando se dió cuenta estaba escondido entre los escombros.
Una figura rojiza, de donde se desprendían tentáculos que emitían chillidos junto a un cuerpo escamoso donde varias formaciones oseas junto a pústulas que pulsaba creaban una cabeza osea sin ojos donde un liquido de color difícil de describir se desprendía de una mandibula rota, dió un rugido por meros instintos de cacería donde solo perduró el recuerdo, era una figura "draconica", así lo describirían lo residentes del mundo pero a la vez era repulsivo, tal vez debió a que su caja toráxica estaba...hueca, no habia nada allí además de su color enfermizo junto a venas que explotaron o pulsaban dando la impresion de que lo harian.
Alep miro furtivamente a la criatura desde una posición segura pero por un instante vio como uno de los ojos pareció detenerse en su ubicación, el se quedó quieto.
Un zumbido masivo junto a un temblor en los alrededores que fue suavizandose además de una vista ocasional llena con un sentimiento repulsivo y hormigueante en su abdomen.
Tenía las piernas algo temblorosas que pronto dejaron de temblar con el sonido de sus pasos.
Por dónde fue que mirara no encontraba nada más que destrucción y edificios destruidos parcialmente. Encarnaba la imagen de un duende con indumentaria que escondía su cuerpo dejando solo al libre sus manos, otras partes del cuerpo estaban totalmente cubiertas con algunos ropajes que encontró en algunas de esas estructuras.
Quería ocultarse, sabía que era inutil frente a sus congéneres pero no contra otros seres o eso concluyó debido a que estaban por todas partes, el diseño era lo que cambiaba no el modelo principal así que el tampoco tuvo que hacer gran esfuerzo más que encontrar algo ajustable a el, pero simplemente rompió algunas telas grandes para hacer algo que pudiera ocultar su figura.
En este mero acto tardo 2 horas merodeando en la ciudad, dónde había encontrado cosas totalmente desconocidas para el, en especial si fueran objetos muy "desarrollados", los notaba por su simpleza estructural, que comúnmente eran figuras geometricas simples además de pequeñas como cubos y hilos que colgaban del cielo.
No tuvo idea de que hacer con tantos milagros tecnológicos, estaban frente a el pero no los comprendía en absoluto, ¿Para que eran tantos cubos?, ¿Por qué habían tantas luces?, ¿De dónde vino ese sonido que vino del cielo que parecía la voz de una criatura del tamaño de montañas?
Solo quedó buscar entre tantos restos algo útil y tocar con un palo todo lo que encontrará, aún tenía cierta aversión por las cosas brillantes pues los cristales de la cueva le habian enseñado a no tocar cosas que brillaban o siquiera acercarse.
Alep se contraba actualmente en un edificio masivo, fue difícil navegar en uno destruido pero valió la pena cuando a lo lejos diviso una luz mayor, era un rio gigante que separaba la ciudad y encontro varias figuras monstruosas acumularse en el puente, peleaban contra varias figuras verdes y bipedas.
Descendió explosivamente, mientras chocaba de vez en cuando con algunas paredes, su vista quedó sepultada ante una cortina de humo. Alep se encontró en un tercer piso, sus pisadas se encontraban con un suelo bastante arenoso mientras su cuerpo atravesaba con rapidez la sala frente a el para encontrarse con un balcón.
Decendio bruscamente denotado por la gran cantidad de polvo que se levantaba por el suelo creando la ilusión de que algo muy grande cayó, aunque solo momentáneamente.
Corría rápidamento, mientras en su cuerpo ocurrían ajuste biológicos y cambios homoestaticos. Habría indicios fácilmente notables como su respiración mas pesada manifestada en su caja toráxica subiendo o bajando además de un hormigueo incesante en su cuerpo cuando esquivaba algunos obstáculos.
Pronto, empezó a notar restos de una batalla en los alrededores mientras podía visualizar ocasionalmente algúna que otra aberración biológica, una cualidad que compartían era que todo su sistema biológico dependía de algo desconocido ya que por si solos no podrian ni sostener funciones básicas.
La sangre de los monstruos no tenía función más que ser un líquido corrosivo, su carne era rígida y anormalmente resistente, tenían tendones ridículamente frágiles a cortes, su piel apenas estaba unida a su carne, sus órganos estaban huecos siendo casi un adorno si no fuera porque tienen relleno extraño con patrones de escala milimétrica, un cerebro funcional pero inexistente además de que estaba unida a una "piedra". Lo noto por las terminaciones nerviosas que estaban ancladas fuertemente a la roca brillante, ese era su cerebro.
"Ridículo"
Recordo el como empezó a experimentar con los duendes, estaba en shock interno, estos monstruos no deberían ni existir pero algo los mantenía en flote y trato de usar esa energía que los mantenía, por su puesto aprovecho su mismo cuerpo para añadir cosas, pero eran utilitarios y en desarrollo, solo bastaba un poco de daño para que estas se rompieran como los tallos-ojo en su espalda, le permitían percibir movimiento detrás de el, las funciones estaban limitadas por falta de un cerebro y capacidad para manipular uno, todo dependía de su memoria muscular como de impulsos electricos de su columna.
"¡Quitate!", grito Alep cuando una de las criaturas se acercaba a el, más que nada salió un chillido muy fuerte de su boca mientras mostraba agresividad, las criaturas eran carroñeras que cazan en grupo, lo vio cuando despedazaron a un bípedo del puente que huía.
Las criaturas le respondieron con agresividad pero se alejaron, no era prudente pelear a muerte por un pequeño duende en especial con un banquete servido en las calles.
"Bien...", Alep los vio retirarse, el se alejo lentamente mientras mantenía sus ojos sobre ellas y después de recorrer una distancia sensata donde no las vió fue a por el puente.
Mientras miraba gran parte de la destrucción que ocurría vio algo a lo lejos y de un salto la evadió. Era cristal, hacia tiempo que aprendió que no debe pisarlas, aunque se tomó un tiempo para sostener una mientras la sostenía frente al puente que estaba bajo un precipicio creada por un sismo.
Tuvo que resistir cuando el sol y otros objetos brillantes le irritaro el ojo que cerró rápidamente.
Miro por los alrededores, estaba muy paranoido últimamente pero ciertamente el sabía que no habia nadie cerca pero tampoco quería ignorar peligro posible, en especial si algo mas grande estaba rondando fuera de las hordas. Estos tendían usualmente a querer alimentarse y el no podría resistir a uno.
...
"Y de acuerdo con lo visto en las cámaras, ¡vemos como se desarrolla en vivo el cataclismo!", una voz hablaba fuertemente mientras aspas de helicóptero opacaban su voz.
En un cuarto vacío, pesaba un ambiente silencioso, era una manifestación del estrés casi desesperante que se originaba por la pantalla.
"E-esto...", una voz delicada mencionó tartamudeando, su voz se apagó mientras se concentraba en la pantalla del televisor.
"¡No puede ser real!", una voz femenina vocifero mientras agarro ferozmente un teléfono.
Bip...bip.
"¿¡María!?, gracias a Dios estás bien, ¡tienes que salir de allí ahora mismo con los niños!"
Pronto la mujer se alejo de la sala un rato mientras hablaba rápidamente, se noto rastros de ansiedad extrema en su voz que se quebraba.
"¿Mami?", una voz tierna, delicada sonó.
"Hijita, vámonos a visitar a tu tío, ¿Si?", la voz de la mujer aún con indicios de ansiedad apagó el teléfono mientras agarraba varias maletas, sus movimientos se tornaron brucos y rápidos.
"Madre...", una voz más desarrollada hablo, estaba emocionado pero asustado, por una parte nunca conoció la carga de vivir así que en cierto modo era comprensible o debería, su voz difería de sus ojos que crisparon momentáneamente al ver el televisor pero recompuso la postura, estaban extrañamente vibrantes desarmonizando con el ambiente tenso.
"Estaremos bien...avisa a tu hermana que es una emergencia, nos vamos a otro distrito", la mujer ignoro la extraña actitud de su hijo pues habian mil explicaciones para el comportamiento, la más común sería que es un adolecente en desarrollo pero sabía que tendría que lidiar con eso pronto o se metería en algún lío.
De un tiempo a otro, varias figuras salieron corriendo hacia un auto y se ubicaron el transportandose a un destino, pero en el camino notaron que la ciudad era un caos, se había disparado la delincuencia.
Había un atascamiento en el puente, dónde varios militares se comunicaban rápidamente y otros coordinaban mientras el asunto se convirtió en una problemática a nivel mundial casi al instante, pues últimamente la sociedad se había hundido en un aburrimiento histórico ridículo por la monotonía extrema como de problemáticas filosóficas, económicas y sociales adjuntas a un futuro desconcertante por tecnologias vanguardistas y una carga informática inimaginable tantos problemas que solucionar pero ahora mismo surgió este problema que unio al mundo en el momento perfecto.
¡Es...Un milagro!
Es lo que dijo un científico cuando descubrio el como los núcleos tenían cualidades ridículas en cuanto a leyes físicas, biologicas o mecánicas, fue un desastre que podría ser convertido en una bendición, fue la razón por la que todos concordaron en lidiar primero con el problema y luego con las ganancias, tuvieron que estar mas atentos ahora mas que antes especialmente con algo que podria revolucionar el mundo por completo y desafiar el estatus quo que se mantuvo durante décadas como siglos en historia.
Volviendo a la familia
En un refugio había un adolecente que miraba retraidamente los alrededores, estaba inmensamente aturdido mientras miraba el techo, inmerso en sus recuerdos movia sus dedos temblorosamente aunque sus ojos desprendían desafío frente al estrés como de emoción nostálgica y entrenada para soportar el infierno que vivió...en su vida pasada.
Pratalus, era su antiguo nombre, se había negado inicialmente a que había renacido en otro mundo.
Era ridículo pero ahora mismo estaba vivo, ciertamente no le importaba ahora mismo pero no podía dejar de pensar en las razones por las que había renacido, estaba más paranoico contra detalles invisibles como pensar que había un secreto dentro de su sopa, últimamente pero se calmo por algo, a la vez que su corazón se hundio en el abismo.
La primera vez que escucho de una invasión lo tomo como una broma pero varios dirigentes no pensaron lo mismo que el, eso fue como hecharle un balde de agua, lo recordaba precisamente porque el vivió en un mundo donde paso lo mismo.
Excepto que hay nada salió bien, el gobierno lo encubrió, las mafias se apropiaron de los avances mientras morían grandes revolucionarios, para cuando intentaron contenerlo...los únicos que sobrevivieron vivían en las torres de pruebas.
Pero cuando las torres fueron destruidas por "Algo", es cuando la humanidad perdió su último bastión.
'Yo morí luchando fervientemente mientras mi vida de 24 años termino, toda mi vida se redujo a intentar sobrevivir.', que ridículo, ¿Le habían dado una oportunidad para que el mismo caclismo se la quitará?
"Hehe", no pude evitar reír angustiosamente, mientras mis ojos se entreceraban y moví mis dedos rápidamente mientras simulaba tocar un piano, lo peor es que renació sin habilidad ninguna, era impotente ante las criaturas, incluso un oso podría acabarlo y eso era absurdo para el.
Miraba el cielo mientras escucho un rugido atronador, estaba acostumbrado a que nada saliera bien pero esperaba que fuera un sueño.
"¿Que?", despertó de su trance por un rugido, miro los alrededores y su mirada se petrifico, en su mente se activo un recuerdo doloroso, un trauma que desencadenó una vorágine de recuerdos.
"¡No!", grito inconscientemente cuando se dió cuenta, no quería que pasará, quería negar sus expectativas pero estás cumplieron perfectamente.
Varias personas oyeron el grito y fue detonante para que empezará un movimiento colectivo en virtud de la supervivencia.
Su último recuerdo fue ver cómo una luz irradio todo el refugio, mientras transcurio el tiempo y al despertar inconscientemente ajusto su respiración para hacerla más silenciosa...
...No había sonido alguno más que su propio corazón latiendo.
Escucho los alrededores pero nada parecía estar cerca, mantuvo la posición por un rato antes de mover la cabeza levemente y vio algo aterrador, estaba en medio de escombros donde varios receptores de dolor le advirtieron cuando intento mover sus músculos.
Tenía todo el cuerpo magullado por incisiones y golpes tal vez relacionadas con el hecho de que estaba enterrado bajo un montón de piedras, estába cerca de una rendija y parecia que alguien lo habia salvado ya que el estaba en un segundo piso pero no sirvió de nada pues ahora esa cosa estaba cerca de el, la escuchaba.
Paso un tiempo desconocido y la criatura parecía haber terminado de comer, iba a por el.
Solté un jadeo al tratar de levantarme, mi vista se oscureció, no había tenido mucho tiempo para reformar mi nueva vida donde viví algunos días en paz.
Ciertamente no pude evitar angustiarme, pero era absurdo hacerlo cuando solo tenia una oportunidad...ciertamente falle miserablemente.
Sin dudarlo dos veces corri hacia una zona estrecha donde tal vez la criatura no logré ingresar.
Paso tras paso, el sonido estridente del metal hundió mi mente en nada más que un grito de supervivencia mientras ignoraba los cortes que soportaba mi cuerpo con la influencia de la adrenalina.
"¡Vamos!", Con los ojos inyectados en sangre por un sobreesfuerzo al mirar hacia adelante el precio se lo llevaron mis ojos con el polvo del edificio y algunos guijaros.
Pero todo terminó cuando una fuerza implacable vertiginosamente lo presiono contra el suelo.
"Tsk, va a doler", pensó crudamente con sus últimos pensamientos, cerró los ojos mientras recordaba sus últimas dos vidas.
Ciertamente murió con muchos arrepentimientos y desearía cambiarlo todo, que corta había sido su vida.
En un instante, solo se escuchó un crujido de sus huesos y su vista se oscureció.