Capítulo 8
Perspectiva de Marcelo
Hora: 1:10 AM
Zona: Alguna parte de Furikiztán
Operador: Sargento Marcelo
Me duele mucho la cabeza, ¿al parecer surgió una explosión, no?
Está goteando sangre de mi cabeza, el golpe fue demasiado fuerte.
"¿Qué estoy tocando?"
Es agua… agua… ¡AGUA!
"Ya recuperé la conciencia, ¿dónde está Kat?"
No la veo. Ese golpe me dejó en mis pensamientos, me olvidé de la situación.
"¡KAT!"
Ya la vi. Está inconsciente, tirada en el contenedor de los misiles. Hay que largarse de aquí.
"¡KAT, despierta!"
No parece responder, no hay mucho tiempo.
Tengo que llevarla cargando.
"Vamos, vamos."
Me dirijo hacia la salida lo más rápido posible. Hay muchos cables que se están soltando, tengo que evitar tocar el agua. Las luces se están apagando, con los focos estallando uno por uno, y el lugar se inunda por completo.
El capitán Angelo habla por el comunicador:
"Marcelo, ¿están ahí? Los estamos esperando afuera, por el otro lado."
"Entendido, para allá vamos."
Salgo rápido de la zona de piloto. La lluvia se siente más fuerte y un helicóptero está lanzando misiles por doquier. Necesito escapar rápido.
"Marcelo, ya los vimos. ¡Vengan ahora!"
"Ya los vi."
"¡Corre de ahí, el helicóptero te vio!"
Miro rápido al helicóptero enemigo preparando la ametralladora, disparando. No hay tiempo para pensar.
Corro lo más rápido que puedo hacia donde está el capitán. Sin embargo, algo me detiene, están al otro extremo, no puedo dar un salto tan grande.
"Capitán, voy a lanzar a Kat hacia usted, agárrela."
"¡HAZLO AHORA!"
Lanzo a Kat hacia el helicóptero con todas mis fuerzas. Ella pudo llegar, ahora me toca a mí.
"¡UN MISIL!"
"¡SALTA AHORA, MARCELO!"
Retrocedo un poco más para tomar impulso, logrando llegar al helicóptero con la intensidad de la lluvia.
"¡Vámonos ahora!"
El helicóptero se va lo más rápido posible antes de que el misil lo alcance. Como un pájaro, nos alejamos rápido de ahí.
"Señor, esto no le va a gustar."
Perspectiva de Hutcher
Bueno, tenemos buenas y malas noticias.
Las buenas son que detuvimos el barco con el gas robado en los contenedores, así que el equipo de Fabiana no tendrá ningún problema con el asalto.
Las malas son que los misiles encontrados son dos misiles para destruir búnkeres.
"Un segundo, ¿por qué búnkeres?"
No sabemos con exactitud, pero algo están tramando con eso.
Continuando, al parecer estos misiles fueron robados o comerciados por un intruso de la milicia.
"¿Hay un traidor?"
Exacto.
Por ahora, tenemos que ayudar a Fabiana en el asalto. Tienen al equipo Rising listo para el ataque.
"Es ahora o nunca."
Perspectiva de Fabiana
Hora: 9:30 AM
Zona: Cerca del hospital Horin, Furikiztán
Operador: Fabianna Kaham
Es el día, por fin daremos vuelta a esta guerra después de tanto tiempo.
Yo misma mataré a ese hombre.
"Preparen los paracaídas."
El general empieza a explicar el plan con confianza. Supongo que subestiman mucho a ese hombre.
No saben lo que él puede hacer.
"Según la Intel y en mis propias palabras, tenemos que atrapar a ese hijo de puta, vivo o muerto."
"Vamos, tírense."
La parte de atrás se abre con una luz que poco a poco va saliendo en un destello.
Al avanzar hacia el límite para tirarme, veo un caos por toda la ciudad.
Me enfurece ver el estado de mi país por la culpa de esos gobernadores corruptos.
"Espera, Delta 1-0."
Alguien me llama la atención, agarrándome el hombro. Al voltear, veo que es el comandante del equipo Rising.
"¡EQUIPO, VAMOS! ¿QUIÉNES SOMOS?"
"¡LOS RISING!"
Todos alzan su grito de batalla como si fueran hermanos. Veo cómo corren y saltan para caer fuera del avión.
*suspiro*
"Ok, aquí vamos."
Nunca me había lanzado desde esta altura. Me da náuseas, mi pelo se está desamarrando. Creo que me lo voy a cortar después.
No puedo ver casi nada, me acomodo el pelo por un momento y realmente me sorprende lo que ven mis ojos.
Poco a poco me acerco más al piso de la carretera, como si tuviera un zoom.
"¡Todos, sus paracaídas!"
El comandante alerta a todos.
En mi mochila jalo para que salga el paracaídas y, como alas, se despliega. Por un momento, me siento viva con esa adrenalina. Es simplemente increíble.
"Espera, no... eso no..."
Me distraigo y choco con un edificio, quedando colgada, diríamos, en el segundo piso, mientras los otros aterrizan seguros.
El comandante de los Rising se acerca.
"Hey, novata, ¿estás bien?"
"TODO BIEN, ¡SOLO QUERÍA TOMAR EL SOL!"
Será imbécil. Le digo enojada porque me pregunta eso, ¿en serio?
"JAJA. Ahora solo jala de nuevo el gatillo."
Con su dedo me indica dónde debo jalar. Supongo que le haré caso.
*Jala el gatillo del paracaídas.*
"¡AHHH!"
"Buen aterrizaje."
"Me duele la espalda."
Siento algunos huesos rotos.
"Con el tiempo te acostumbrarás."
Con mi mirada, me extiende la mano para levantarme. A veces, los americanos tienen este tipo de personas que me caen bien.
"Gracias, vamos para allá."
"Claro, todos los Rising conmigo."
Hace un silbido y con su dedo da unas vueltas; es la señal para reunirse, así que yo también soy parte del equipo por ahora.
"Acabemos con esto."