"¿Conoces el pasado? Es una pregunta que mis padres me decían para que nunca olvide la historia de mi tierra, una que fue conquistada por la vieja Roma cuando aun era poderosa, ellos siempre se quejan de como nuestro pueblo adopto parte de su cultura, no creo que haya vivido todo ese proceso así que me gusta crear que esa pregunta es una tradición en mi familia desde hace varias generaciones, pero no creo en todo lo que me dicen porque dudo que alguien recuerden todo lo que dices sus padres y abuelos con claridad, si quejan tanto ¿por qué creen en Jesús Cristo? Dudo que su padre haya sido el Dios de mis ancestros y aun así nunca olvidó esa pregunta porque Britania aun no se encuentra en su mejor momento, un tonto ex rey realizó un trato con mercenarios de otras regiones quienes ahora nos atacan, es desalentador porque a veces pienso que vamos a perder todo y ante tales ideas tan pesimistas vuelvo a esa pregunta para estar preparado para cualquier situación."
Fueron los pensamientos de un sirviente de Lady Vivian, hija del Rey actual conocido como Uther Pendragon. Aquel pensador decidió concentrarse en su trabajo al organizar al resto de sirvientes del castillo para limpiarlo y prepararlo para una cena especial de la familia Real, no era el jefe de la operación pero sí podía líder ciertas cosas, mientras hacía su trabajos notó como algunos empleados no estaban por lo que no dudó en irlos a buscarlo directamente tras molestarse fuertemente, el sonido de sus pasos dejó de producirse cuando en su búsqueda notó a un joven sosteniendo una espada peculiar, sus ojos lo obligaban a ya no continuar con su meta original al reconocer la rareza del arma, una única en su especia y consideraba imposible de blandir por sus leyendas, se trataba la Golden Sword of the Victorious, la extraña corona que también era un arma. Su mente simplemente viajo al pasado, no tan lejos y sí muy cerca, antes de todo este trabajo solo acompañaba a su Master Vivian en cierto evento popular donde un grupo de hombres de todas las edades y formas intentaban mostrar ser dignos de gobernar al querer reclamar la famosa espada, muchos fallaban en su cometido al no poder retirarla de una piedra la cual siempre la había evitado que cualquiera la tomara.
-Que desperdicio, tenemos cosas mas relevantes que hacer. Sigo sin comprender porque mi padre insiste en todo esto, soy lo suficientemente capaz para gobernar igual que un rey, soy mas poderosa que cualquier humano y muchos de sus soldados-Mostró su disgusto mediante un tono de voz un poco grave.
-Master Vivian, no te exaltes, conozco perfectamente lo capaz que eres y creo que cualquiera que se fija en tus acciones llegará a las mismas conclusiones. ¿Le parece bien si le preparo hago diferente hoy en la comida para superar esta amargura?-Sugirió a través de una voz gruesa de un hombre ya maduro.
-No, gracias. Prefiero lo mismo de siempre, solo estoy molesta con Uther. Ya sabes, merezco la corona porque crear un reino mejor y tengo lo necesario para lograrlo, no por nada soy una gran magus que ha estudiado mucho, pocos se pueden comparar con mi poder y conocimientos, como mas libros que comida real-Respondió de la misma manera hasta que cuando soltó esas últimas palabras bajo un tono menos amargado y mas energético porque voz ahora era algo aguda.
-Eres adorable cuando no estas enfadada, como quisiera que no fuera tan frecuente en estos últimos días, de verdad espero que no te vuelvas en una amargada-pensó mientras miraba como ella no dejaba de presumir con orgullo capacidades sin llegar a atacar a alguien directamente.
-Aun tenemos mucho que aprender, especialmente tú ya que te falta un circuito mágico mas potente si quieres hacer magia sin dañarte-Dijo alegremente.
La charla con el paso del tiempo se volvía amigable hasta, sin embargo un en abrir y cerrar de ojos un poderoso ruido dominó porque consistía de un cumulo de gritos de los habitantes presentes en ese momento de tal intensidad que lograban asustar a los despistados, entonces el par notaron que un joven ya había removido aquel objeto y así se habían dado cuento que el ruido de los demás era por el impacto y euforia de los espectadores por este suceso. Los labios de la hija de Uther formaban un arco hacia abajo lentamente a diferencia de su acompañante quien estaba en shock sin poder tras tal mueca mostrarlo externamente ya que su mirada marcaba seriedad, se quedó congelado mientras su jefa se retiraba decepcionada aunque en medio de sus pisadas ella le llamaba la atención con el fin de regresar con su gente, pero antes de declarar una respuesta el rey notó la situación y no tardó en acercarse al sirviente a la vez que empezaba a hablarle, el criado le notó cuando la distancia entre ellos era mínima.
-Convence a mi hija de no irse, el castillo necesita la presencia de toda la familia y ya que eres un sirviente te pido que prestes tus servicios en la organización de la coronación y de una comida real para recibir al nuevo rey de Britania, no dejes que Vivian pierda su reputación-Le pidió con una sonrisa genuina.
-Lord Uther, trabajo para Lafy Vivian, tienes mas ciervos que se pueden encargar de cualquier tarea-
-Eres leal, me gusta que mi hija tenga buenos ciervos aunque eso no es una excusa para negarte, sí no lo haces por mí hazlo por ella, no puedo cambiar la opinión de los demás sobre ella al no ser legitima y eso va a empeorar se retira-
El criado solo suspiró para posteriormente acercarse a su master con el fin de transmitir el pedido del padre, ella solo lo miró con desagrado y dio un breve vistazo al rey solamente para resignarse luego de bajar su mirada por unos segundos y así centrarse en los ojos marrones de su criado.
-Bien, lo hecho no se puede cambiar. No seré una reina pero mírame, sigo siendo excepcional con mi rol de dama del lago en nuestra tierra de hadas, tal vez el novato puede cooperar conmigo para crear un buen futuro si reconoce mis habilidades. No perdamos tiempo, vamos a recibirlo de buena manera y luego nos regresamos al lago para informar de su coronación a los demás, con una noticia así no vendría que cambiaras el menú de vez en cuando, ¡vamos!, confió en que harás un buen trabajo en las preparaciones y quizás con eso dejemos una buena impresión-
Se separaban dentro del castillo para ordenar en diferentes rutad, el criado se dirigió con algunos de los encargados de la limpieza y cocina para discutir el tema mientras algunas sirvientas miraban le miraban con curiosidad al no reconocerlo, se fijaban en su pelo rubio, en sus ojos marrones, en la falta de vello para formar una barba, en su espalda robusta y brazos gruesos, algunas comentaban su opinión entre ellas las cuales en su mayoría destacaban como su carencia de cejas era graciosa haciendo que su rostro maduro de tipo rudo perdiera encanto para los estándares de esa épocas, no le veían como el mas atractivo hasta bromeaban con regalarle pelo o que él debía dejar crecer su pelo para cubrir frente con cualquier extraño peinado que no se podían imaginar de tal forma que empezaban sugerir para nuevos estilos que aun no existían de acuerdo a sus limitados conocimientos. Aquello molesto al señor quien apretó sus puños a la vez que mostraba una mueca de irritación y antes de que expresará su malestar las otras presenciaban como algo se movía debajo de su ropa hasta que en algún punto algo salió parcialmente, era una mariposa que golpeaba la nuca con su cabeza, ellas en un principio clasificaban erróneamente al animal así que expulsaban gritos por imaginar las posibles identidades del insecto.
-¿Qué haces idiota? No quiero defraudar a Lady Vivian, se supone que eres mi cuerpo y yo tu voz, por favor dime que no tendré que enseñarte tu lugar otra vez, ¿por qué siempre lo olvidas? Deberías ser como yo, una persona que recuerda cualquier cosa como las historias de mis padres y abuelos. Creo que debes pensar en mi famosa pregunta sobre conocer el pasado si ya no quieres equivocarte-
-¡El único idiota aquí eres tu!, te haría caso para evitarme problemas si no me molestaras con ese discurso cada vez qué hago algo que no te guste, eres tan molesto que debería aplastaste mariposa inútil. ¡Joder!, los demás nos ven por tu culpa, chicas no mal piensen la situación, solo discuto con mi familiar mágico por lo inepto que es-
-Eso es una mentira-pensó aun cuando le siguió el juego al quedarse callado.
Los jefes observaban la escena con disgusto, él encargado de la cocina movió sus hacia un lado como unan muestra de irritación y no pudo resistir por lo que sus pies ahora iban a otra dirección lejos de ellos, el hombre a cargo de la limpieza quería hacer lo mismo por lo ridículo que le parecía la discusión en medio de un evento tan grande, luego de pensar en las consecuencias decidió quedarse para darle los detalles a los ciervos de Vivian.
-No te preocupes por la cocina, el equipo de cocineros de siempre es más que suficientes, con que te encargues de la limpieza es mas que suficientes, es castillo es muy amplio para que yo solo supervise el trabajo de las mujeres así que ve a acomodar la entrada y el camino principal al comedor, asegúrate de bloquear cualquier otro camino a los externos-Comentó el jefe de limpieza antes de dirigirse a la entrada de la cocina para empezar a limpiar desde ahí hacia atrás bajo la asistencia de algunas mujeres a la vez que unas pocas fueron a arreglar ciertas habitaciones.
-Deberías aprender de él, no pierde el control aunque le faltamos el respeto, tienes suerte que aun nos deje ayudar. Solo sigue mis ordenes si no quieres problemas como siempre-
Sin mas demoras, el dúo se dirigió a las mujeres en un ambiente algo tenso por lo sucedido, el hombre sin cejas simplemente las observaban sin soltar una sola palabra porque su familiar se ponía en su cabeza luego de volar un poco al mover sus alas las cuales captaban la atención de ellas que no evitaban seguirlo con la mirada de tal maneta que ahora el hada había conseguido su total atención.
-Para aclarar, no soy su familiar, somos amigos a pesar de ser hadas de diferentes rangos y aunque ustedes no lo crean por mi tamaño yo soy quien lidera. Bien, no perdamos mas en tiempo linduras, empecemos a bloquear algunos pasillos y sí todo sale bien les prometo una buena fiesta de té o algo de estilo mis amores-
-No esperaba que lady Vivian tenía dos sirvientes, pero por cono te escondías parecía que te ocultabas de nosotros. ¿Qué nos das a cambio de no hablar de esto con su señora? Debe ser muy importante para ustedes ¿qué más nos ocultan? No creas que por hablarnos bonito somos sus amigas señor mariposa-dijo una de pelo castaño.
-¡Sí!, Ella tiene razón. Los hombres son tan pocos sutiles, que idiotas-Exclamó la más joven.
-¿Y eso qué tiene que ver?-Preguntó el hada mariposa.
-Perdónenla, su pretendiente tenía aventuras con otras. Desde ahí siempre tiene bronca con los hombres, sin embargo ella me apoya en mi botín así que nos ofreces-Comentó al ser mágico.
-Leo, por favor déjame golpearlas. Ya estoy harto que siempre nos chantajeen-
-No, sí las tocas te mato. Señoritas, no nos molesten que yo puedo aguantar pero mi amigo es tan explosivo que cualquier cosa lo altera y dudo que alguno de nosotros queramos armar un show dentro del castillo en un día tan especial para la familia Pendragon. ¡Mejor hagamos un gran trabajo!.
Sin muchas opciones, todo el grupo incluyendo las sirvientas que no hablaron fueron a hacer su labores, algunas solo limpiaban el polvo mientras otras movían cosas no tan pesadas para dejar mas espacio libre en el pasillo, el amigo de la mariposa era el encargado de levantar de mover las cosas mas pesadas las cuales eran puestas en otros pasillos como una especie de bloqueo y asi estaban por un buen rato, no era el trabajo más difícil pero sin duda era tedioso. De las dos hadas , el del aspecto humanoide era el más agotado ya que su compañero no hacía nada al no poseer manos ni dedos, esto irritaba al trabajador así que sin escuchar sus quejas simplemente se separó de él y ante tal suceso presenciado por las demás causó que algunas ya no se tomaran enserio a la mariposa y solo se retiraron.
Las memorias se acababan y el pensador volvía en sí para al final notar que el joven rubio ya se había ido, tras un breve suspiro caminó con sus patas a la vez que intentaba imitar el sonido de pisadas humanas al concentrar un poco de magia en sus pisadas para potenciarlas, en el trayecto casi fue aplastado por algunos sirvientes por estar fuera de su rango de visión lo cual se repetía constantemente a tal punto que se rindió de intentar caminar de esa forma para volar, el aleteo de sus alas evitaban chocar con otros hasta que intencionalmente estamparse con el rostro de una de sus criadas distraídas en una charla sobre cual noble era el mas idiota.
-El ex pretendiente de la niña es idiota pero ella es peor, solo alguien tan joven creería que un noble se fijaría en una sirviente para algo serio-Antes de seguir hablando recibió el impacto y su voz se ahogo.
-Oye, no seas tan mala con la más joven, no es un niña por tener tu edad o experiencia al menos ella esta trabajando no como tu-
-¡Quítate de mi cara!-gritó hasta que la mariposa obedeció-No tienes mi respeto, ni tu ni Vivian ni por ese joven rubio, realmente no hay una opción decente para gobernar este reino. Dile a Vivian que sí me pongo a trabajar no es por ella porque nadie de la casa la reconoce como un Pendragon, espero que te tomes enserio este trabajo-
-Sí quieres ser profesional no me des tus opiniones que no pregunté, me da igual si no me tienes respeto y por eso tienes el descaro de hablarme de esa forma. ¿Crees que estoy de acuerdo con que ese chico sea el nuevo rey? No, pero no por eso voy a quejarme en hora de trabajo, regresa a trabajar y no vengas sola si no te reportaré-
-Curioso, no pensé que podrías ser maduro, bien, haré mi trabajo sí dejas de ser tan amable para impresionar o la razón del porque lo hagas, ya me quejaré con las demás en otro momento-Ella declaró para luego ir hablar con su compañera quien se había limitado a observar la interacción en silencio.
El hada de bajo rango volvió con las demás para terminar con la limpieza, de vez en cuando escuchaba comentarios sin mucho respeto a su persona por su rango y aspecto mas que nada eran cuestionamientos sobre por que él debe dar ordene, no le dio muchas vueltas en su cabeza para limitarse en sus tareas. Cuando terminaron todos se colocaban cerca de las paredes para dejar paso al nuevo rey quien salió del castillo y entró por ese camino puesto por ellos con el fin que los habitantes le vieran, también para ser acompañado por otros a lado de él y detrás de él en fila.
-Y pensar que tal vez el rubio y yo tenemos la misma edad en humano, debería practicar mas para siempre sonar maduro. Esto es aburrido, como quisiera solo jugar con mis amigas hadas en vez de trabajar, ojalá que el chico no piense como yo, ¿de verdad alguien tan joven va liberarnos de los invasores? Míralo, no tiene músculos y su rostro es muy femenino, no tiene cicatrices ni nada-pensó frustado.
Los sirvientes presentes analizaban el aspecto del joven de pies a cabeza, no era el mas alto pero aun no era adulto, el verde de sus ojos cautivaban al hada a pesar de que el cuerpo no era el mas masculino, por un momento se olvido de los demás al solo verlo nuevamente. Cuando el joven rubio concretó su trayecto hacia el comedor real se sentó al lado del mago Merlín y Uther Pendragon, todos los presentes comían bajo tensión ya que cierta cantidad de nobles y criados estaban en desacuerdo con la coronación, no lo expresaban verbalmente pero sí a través de miradas llenas de incomodidad por su presencia como un patrón que solo Vivian evitaba con algo de esfuerzo.
-Lord Uther, todos los presentes amamos la leyenda de Caliburn, es una de mis historias favoritas porque nos saca una sonrisa aun con los problemas que tenemos y aun así tengo mis dudas sobre esto, mira papá, entiendo que la espada es más que nada una corona rara pero Arthur es joven, necesita buenas guías y creo que yo soy una perfecta opción-Mencionó todo aquello torpemente hasta que en sus últimas palabras recuperó confianza al alabar su ego.
-Vivian no hables por todo, no tengo que recordarles que solo quieres robarte el trono aun cuando no eres de la familia real, ¿acaso todo esto es un broma de ustedes dos? Para eso busquen bufones. Lo que nos interesan realmente es que pasará sí no creemos en el sucesor, ¿por qué los ocultaste? ¿qué clase de plan tienes? Tal vez no querías que nosotros tuviéramos una oportunidad para gobernar-Criticó sin filtros junto a una sonrisa maliciosa de un noble.
-Comprendo sus dudas, sin embargo este evento no es un complot contra uno o varios individuos, Caliburn no fue construida solo para obedecer a este hombre a pesar de ser mi hijo, sí él no sacaba la espada de la piedra cualquier persona podría tomar su lugar, no necesito convencerlos con esta historia por que Merlín me contó varias profecías y la de mi hijo es la mas prometedora, dudo que se atrevan a cuestionarlo cuando es de los magus mas poderosos-
-No somos idiotas, para la próxima elabora mejor tus excusas por favor. Mejor coméntanos como eran esas otras profecías-
El choque de palabras continuaban entre ellos, el resto permanecía en silencio con la excepción de Merlín y Arthur quienes intercambian diálogos solo para si mismos, el hada insecto aun se enfocaba en el sucesor tras comprobar que en todo este tiempo no mostraba más expresiones faciales que una simple mirada seria aun cuando la forma de hablar del magus era uno lleno de carisma, aquello lo tenía tan intrigado que empezó a tener una pizca de fe en él como regente aunque no era suficiente como para apoyarlo abiertamente.
-No te preocupes Arthur, te has esforzado mucho como para que unos amargados arruinen tu día aunque ya no eres humano, con el tiempo te aceptaran. Mírame, no tengo la actitud adecuada de mi posición según la aburrida nobleza y aun así me respetan-
Arthur procesaba con dificultad las revelaciones, su visión estaba en los alimentos que consumían a la vez que el insecto apartó parte de su atención a él tras escuchar algunas palabras de la verdadera identidad del chico, las preguntas escalaban en su mente al igual que en los demás a la ves que la discusión de ex regente y aquel noble no parecía acabar, el escenario era tan poco favorable que el hada volador fue llamado junto a sus compañeras de trabajo para ayudar a preparar algo para aliviar el ambiente.
-El ambiente es tan pesado que va a explotar, bien mientras el jefe de cocina y su gente prepara un platillo especial intenta hacerlos reír, lamento que sea tan poco profesional pero me ha dicho que sabes como entretener porque las criadas no han dejado de reírse de tus ocurrencias-Sugirió avergonzado el encargado principal de la limpieza con una creencia genuina de que las cosas eran así entre la mariposa y las empleadas.
Sin muchas opciones y de mala gana se dirigió a la mesa donde lanzó chistes que fueron del disgusto de todos, nervioso fija su mirada en la sirvienta grosera que no le respeta abiertamente en busca de ayuda y desafortunadamente la miró atendiendo al noble conflictivo en plena discusión, su visión buscaba a una compañera disponible aunque al final la única era la más joven que desconfiaba en los hombres quien miraba al problemático con desagrado.
-Arthur, mejor salgamos un rato hasta que algunos aprenden modales y no olviden su posición. Espera, no me mires con esa cara, no quiero hacerte nada malo porque heredaste la corona, sí, soy uno de los varios sirvientes de Lady Vivian pero no creo que hayas escuchado cosas malas de ella ya que es una hada de gran reputación, mira, sí solo te quedas no vas a cambiar las codas y es mas no tienes que salir conmigo porque Merlín puede ser tu acompañante-
-La mariposa tiene razón, Arthur ve a despejar tu mente un poco aun no es la hora de interactuar con tus súbditos, nadie es el mejor rey en su primer día pero confió que traerá paz a nuestro reino-Concordó con un tono de voz menos grave.
El heredero mantenía su inexpresividad en su nuevo camino al lado del magus, durante el tiempo de ese descanso el insecto no dudo en seguirle al hacer uso de sus alas que no generaban ruido irritable. Por otro lado el noble problemático acusaba de posible traición al ex monarca, idea que era atrayente para algunos como su criada y hasta el propio insecto mágico, este último tenía sentimientos encontrados porque por un lado creía que su señora era la mejor opción y por el otro poseía curiosidad por como seria su desempeño en el trono por su carácter.
"¿Conoces el pasado? Es una pregunta que mis padres me decían para que nunca olvide la historia de mi tierra, una que fue conquistada por la vieja Roma cuando aun era poderosa, ellos siempre se quejan de como nuestro pueblo adopto parte de su cultura, no creo que haya vivido todo ese proceso así que me gusta crear que esa pregunta es una tradición en mi familia desde hace varias generaciones, pero no creo en todo lo que me dicen porque dudo que alguien recuerden todo lo que dices sus padres y abuelos con claridad, si quejan tanto ¿por qué creen en Jesús Cristo? Dudo que su padre haya sido el Dios de mis ancestros y aun así nunca olvidó esa pregunta porque Britania aun no se encuentra en su mejor momento, un tonto ex rey realizó un trato con mercenarios de otras regiones quienes ahora nos atacan, es desalentador porque a veces pienso que vamos a perder todo y ante tales ideas tan pesimistas vuelvo a esa pregunta."
Fueron los pensamientos del hada tras intentar recordar su pasado en una especie de regresión emocional dentro de una enfermería, se jalaba el pelo de frustración al no poder acceder a más recuerdos ante la presión de ser grabado y bajo la supervisión de una mujer de vestir rojo con un extraño pelo rosado. Se sentía tan mal que no intentó escapar de sus ojos analítico, solo se quejaba de dolor por no comprender que sucedía mientras la contraria escribía bastante en unas hojas de observaciones.
-Leo, ayer me contaste otra cosa, me dijiste que eras un sirviente humano del castillo de Camelot y ahora dices que siempre fuiste un hada. No te podemos dejar ir sin que nos aclares las cosas, se supone que este lugar mantiene el orden del tiempo, pero tu te colaste en nuestra última misión-
-Joder, lo último que recuerdo es que las cosas se caían a pedazos por tu gente, fui al acercarme a ustedes por tomar su ruta de ida y de la nada llegue aquí-
-Mi equipo viaja en el tiempo para arregla anomalías temporales que ponen el peligro la existencia humana, estos problemas no son naturales siempre hay algo o alguien quien las crea así que tus recuerdos contradigan la historia original pero no que tengas dos vidas distintas-
-Hay muchas cosas que no entiendo de este lugar, la época de mi vida solo son meras leyendas y tienen más de una versión , tal vez ustedes son deforman mi pasado-
-No te rindas, intenta recordar otra vez para que los de arriba me permitan traerte a uno de tus conocidos, arreglar el tiempo es muy complicado asi que buscamos ayudas de héroes y entre ellos están Arthur y Morgan, no me parece un mal trato-
-¿Arthur esta aquí? Sí, es un buen trato ¿pero no puedo hablar con él de una vez? Tengo tantas preguntas que hacerle-Sugirió algo avergonzado
-Sí tanto te importa ese rey ¿por qué no me cuentas que tipo de relación tenías con él?-
-No lo se, todo es tan borroso. No se que siento por él, tal vez es respeto nada más pero cuando pienso él siento una rara calidez, por eso es mejor que hablé con él ya que quiero creer que el tiene mas respuestas que yo-
-No es necesario, ya te comenté que Uther desapareció antes de que Arthur consiguiera a Caliburn y que Merlín anunció la profecía del Rey a más de uno enfocándose en esa espada-
-No se que quieres que diga, entiendo que puedo ser una amenaza y eso y esto es parte de sus procesos de trabajo, no me molesta eso, se necesita de una buena seguridad para cualquier cosa aunque ya dije que no tengo claro las cosas. Doctor, los que deberían responder sería ese equipo que viaja en el tiempo porque ellos vieron mi época-
-Hay un equipo de investigación que esta haciendo su trabajo mientras hablamos, nuestra sesión no concluye por que me cambias tu historia y no se tomaré en cuenta para tu seguimiento-
-Ahora entiendo porque gran parte de la cultura Celta se perdió, joder, ni siquiera puedo confiar en mi recuerdos. Tengo que recordar-Se exigió en sus pensamientos.
-Podemos quedarnos aquí todo la noche o hasta una semana sin problemas-
-No por favor, ya me duele la espada de estar sentado todo este día, son importantes pero no tienen sillas de la mejor calidad. Bien, empezaré con un inicio claro y trataré no irme con información de poco valor.
Soy Leo, no es mi nombre real creo que es un apodo, mis padres son hadas de bajo rango que crecieron en el gobierno de Uther y no se-Soltó esas palabras a la par que su voz durante toda esta extraña entrevista alternaba en una aguda y una menos aguda.
-Parece que la regresión emocional pierde peso, toma un descanso de cinco minutos-Pidió antes de darle una botella de agua.
Poco a poco le costaba respirar al entrevistado, no acepto la botella y simplemente la acumulación de emociones le empezaba a afectar gravemente, pensaba en patalear y gritar o hacer cualquier cosa para evitarle esa presión, tales pensamientos de un momento a otro cesaban cuando sintió la mano helada y pesada de alguien más en su hombro, reaccionó violetamente al levantarse de golpe.
-Es normal que reacciones así, aun no te explican bien como funcionan muchas cosas porque no tienen el tiempo de ir a tu ritmo ni yo tampoco, entiende que todos tenemos responsabilidades aquí y si quieres que esto termine debes terminar con tu rol-Le explicó Arthur Pendragon quien había entrado durante su paranoia.
-Siempre con la misma actitud Lord Arthur, eres tan irritante. ¿Por qué exageras tanto con tu sentido de deber? Dudo que abraces a alguien en toda tu existencia-Respondió molesto y extrañamente lo decía con una sonrisa.
-Nunca autorice esto, iré a hablar con los superiores así que habla con él y toma registro-Declaró enfadado para ya retirarse.
-Arthur, quiero golpearte porque eres un engreído y también beber alcohol contigo, no te lo tomes a mal, te respeto como rey pero eres molesto-Lanzó esas declaraciones mientras tocó la mano del rubio cubierta por su armadura sin dejar atrás la misma sonrisa.
-No te recuerdo, es agradable encontrar a otro compañero de Britania aunque según la información del equipo de investigación eras criado de Vivian ¿puedo confiar en ti?-
-Por como lo dices me haces pensar que ella se volvió amargada. La verdad no puedo asegurar nada porque no recuerdo bien las cosas, sabes, que estas aquí me calma y eso lo que necesito para no hacer una estupidez así que confió en ti para que confíes en mi-
La charla entre ellos era analizada por un grupo de personas mediantes una cámara de seguridad, tomaban registro de lo que sucedía y se preguntaban quien eras él por carecer de fuentes de información que acrediten su existencia. Su atención en los videos fue alterada con la llegada de la doctora quien les reclamó por aprobar la visita de Arthur aunque de vez en cuando miraba las pantallas para saber que pasaba entre los de Britania, especialmente la mas joven quien aun no era adulta.
-Se que parezco irresponsable con el paciente, pero les recuerdo que no soy psiquiatría o psicóloga, saben que no quiero que su salud se deteriore aunque ustedes me pusieron de acuerdo para sacarles respuestas-Explicó sin más.
-Lo entiendo. Disculpa por presionar de más, el mundo aun sigue siendo un desastre y no se que tanto se van a complicar más cosas con la existencia de Leo-Le respondió una mujer pelo castaño y largo de unos ojos azulados.
-Las cosas se complican cada vez más. Pero hay que darle un descanso, hemos tratado mejor a otros en nuestros otros viajes en el tiempo, por algo te llevas bien con Gudako. Ella es amable con todos así que sigamos su estilo-Comentó con cero preocupación un hombre pelirrojo de ojos verdes quien vestía de doctor.
-Bien. Por ahora sigamos observando al paciente-Declaró al ver como la joven pelirroja de nombre Gudako no paraba de ver la grabación.
-Arthur, ¿recuerdas como fue realmente tu coronación? Sí me lo dices sabré en que miento para encontrar mi pasado, te prometo que no quiero inventar nada, mi lema es siempre hay que cuestionarse si realmente conoces tu pasado-Fue el comentario de Leo a Arthur bajo una sonrisa.