Lana y Liam acompañaron a Kyle al hospital para asegurarse de que su herida recibiera el cuidado adecuado.
—Gracias —susurró Lana con los ojos aguados mientras se sentaba en una silla al lado de la cama donde estaba sentado Kyle.
—Lo siento mucho por todo Lana. Solo esperaba hacer lo correcto y ayudarte en el camino, pero la situación...
—Shhh, entiendo todo Kyle, así que por favor deja de disculparte. Ya has dicho 'lo siento' varias veces. Lo importante es que al final dejaste que prevaleciera la justicia y todavía elegiste seguir el camino correcto —elogió Lana mientras sostenía la mano de Kyle y la apretaba suavemente.
Al ver eso, Liam, parado detrás de Lana, tosió repentinamente y susurró —Amor, la enfermera todavía está vendando su brazo herido.
Kyle, que entendió el posesivismo de Liam, se puso rojo y gentilmente retiró su mano de la de Lana.