Después de que Liam hiciera firmar a Lana ese papel de concederle deseos, empezaron a hablar de varias cosas como buenos amigos. Tenían una buena conversación tomando té y era principalmente sobre Lana, ya que Liam estaba ansioso por saber más sobre ella. Esta era la primera vez que sentía que quería que alguien le contara todo sobre su vida.
—¿Así que un día planeas batallar conmigo dentro de la sala del tribunal? —Liam murmuró con una sonrisa porque Lana dijo que deseaba alcanzar las alturas donde pudiera luchar un caso con uno de los mejores abogados del mundo, ya que ella también quería ser reconocida como una de las mejores entre abogados a nivel mundial.
—Sí... ¿Algún día? Jaja ¿Estás seguro de que seguirás siendo el mejor hasta entonces? Todavía me falta mucho camino para llegar allí, ya sabes. —Lana murmuró con una sonrisa.