Los ojos de Delacy temblaron, y sus pestañas mojadas vibraron.
Mucha sangre le subió a la garganta de repente, y la escupió, salpicando con algunas gotas a Logan.
—¡Asqueroso! —Logan la miró con furia y la arrojó al suelo, provocando que Delarcy cayera pesadamente al piso.
Respiraba lentamente y extendió su mano para agarrar su estómago sangrante.
—Me siento mejor ahora. Por fin completé el trabajo. —Logan rió entre dientes y se giró para mirar a Loco, quien aún respiraba, pero con dificultad. —Tsk tsk, ¿todavía con vida, eh? —Se acercó a él y adelantó la pistola para dispararle otra vez, pero justo entonces, un aroma muy familiar entró en su nariz.
Sus ojos parpadearon con furia, y giró la cabeza para ver a Leia, que parecía haber despertado de su coma, de pie junto a la puerta con una expresión fantasmal en su rostro.
—¡Tú! —Frunció el ceño y observó cómo Leia comenzó a caminar hacia él.