[Rumbo a la guerra]
—Justo cuando había pasado menos de un año desde que mi hijo Julián se graduó de secundaria, en abril, recibí una convocatoria de Trinidad y Reece. Solo que esta vez no era para que me presentara en su castillo en Colorado. No, esta vez la convocatoria era para ir al complejo de hadas.
—Al parecer, estaba comenzando una guerra y estábamos siendo llamados como refuerzos. Tenía que partir con tantos luchadores capaces como pudiera. No era la manera típica de proceder para nosotros los cambiantes, pero no había absolutamente tiempo que perder.
—Iba a partir con Aarón, ya que él era fae, papá, Kent, Toby, Morgan, Reed, Bailey y otras cuatro docenas de hombres y mujeres de la manada. Ninguna de nuestras parejas vendría con nosotros porque se quedaban en casa con todos los niños. Y Doc nos acompañaba, pero no como luchador, iba a ser un médico en el campo.