—¿Por qué estás jadeando? —preguntó Nicklaus una vez que estaban dentro del coche.
—Tuve que usar la salida trasera, antes de que pudiera levantarme, los reporteros ya habían bloqueado la salida delantera, y tuve que correr, no quería que te preocuparas por mí.
Ella explicó con una sonrisa; Nicklaus soltó un suspiro después de escuchar su explicación.
—Te dije que te sentaras conmigo, ahora mira lo que pasó —Nicklaus regañó con un pequeño fruncido de ceño; —Ah, ya sabes que soy muy tímida. Simplemente me desmayaría de vergüenza.
Se rió y Nicklaus sonrió. Recordando algo, ella preguntó;
—Oh, ¿por qué no fuimos a la casa familiar? ¿No está el abuelo en casa?
—Sí, su asistente me envió un mensaje de texto diciendo que no estaría en casa. Se reprogramó para mañana —Nicklaus explicó y Tiana asintió.