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—Lin Xia, desprecio el uso de supuestos protectores para arrebatar recursos —dijo Mo Rao—. Por otro lado, tú pareces muy familiarizada con este método. ¿Acaso has dependido de tu protector para arrebatar muchos recursos?
Después de que Mo Rao la cuestionó, la expresión de Lin Xia cambió.
—Ah cierto, ¿no han habido rumores recientemente de que el CEO de la Corporación Peng es el papi rico de Lin Xia?
—Así es... Ella tiene un papi rico, pero está lanzando sombra a Mo Rao.
...
Cuando la discusión llegó a los oídos de Lin Xia, lanzó una mirada fulminante a las personas que estaban hablando y luego se volvió para mirar enojada a Mo Rao.
—¡¿Qué pruebas tienes para decir eso de mí?! —preguntó Lin Xia.
—¿Y tú qué pruebas tienes para arruinar mi reputación en línea? —preguntó Mo Rao.
Lin Xia fue dejada una vez más sin palabras por Mo Rao. Ella pensó que Mo Rao era una chica dócil, pero no esperaba que fuera tan elocuente. Mo Rao no era para nada una persona sumisa.
