—Ye Xin miró a Gao Wen desde las esquinas de sus ojos —dijo—. ¿Loca? ¿Tienes el descaro de llamarme loca? Mírate. La madre de Ning Xia se convirtió en la Señora Ning. Incluso la madre de Ning Dong se convirtió en la Señora Ning. ¿Y tú? ¿Quién eres tú, Señora Ye?
—La voz de Ye Xin se elevó mientras continuaba diciendo —Soy un hijo ilegítimo, uno que no puede ser reconocido abiertamente. ¿Irme contigo? ¿Qué pasa si me voy contigo y ese hermano barato mío descubre que solo soy su media hermana? ¿Qué crees que hará?
—La luz en los ojos de Gao Wen se desvaneció lentamente con cada palabra que salía de los labios de Ye Xin.