Había varios oficiales de policía parados justo al frente de la multitud e intentando convencer al hombre de que se detuviera, sosteniendo pistolas en sus manos.
Al lado del parterre, había un anciano y un estudiante universitario cuyos brazos estaban heridos y estaban siendo atendidos por personal médico.
La escena era bastante impactante.
—Escuché de sus vecinos que se divorció de su esposa hace unos años debido a su personalidad antisocial. También hirió involuntariamente a sus padres quienes ahora se han mudado al campo —dijo Tan Sangsang.
—Hey, me da miedo que pueda lastimar a esa niña pequeña. Me pregunto... —comentó Yan Jinyi.
—Déjamelo a mí —dijo Yan Jinyi.
—¿Eh? —parpadeó Tan Sangsang.
—Solo espera para tomar algunas fotos, escribir tu artículo y entrevistarme cuando llegue el momento —exclamó, dando una palmada en el hombro de Tan Sangsang—. Puedo lidiar con un pececillo como él con facilidad.