Liang Shihan también estaba impactada por la apariencia de esa mujer; no esperaba que alguien más atractiva que Ye Yiyi apareciera, pero no se atrevió a mostrar su sorpresa en el rostro.
La mujer caminaba lentamente entre la multitud. A medida que su figura pasaba, había muchos suspiros de sorpresa.
Sin embargo, justo cuando todos intentaban descifrar de dónde venía esta mujer, la vieron caminar directamente hacia la mesa de Ye Shaoting. Se detuvo allí y sus impresionantes ojos recorrieron a todos en la mesa, finalmente posándose en Fang Xiu Min.
Sus labios rojos comenzaron a abrirse y dijo con una voz muy dulce:
—Lo que tía dijo estaba correcto.
¿¡Tía?!
Fang Xiu Min miró a la mujer con pánico y sospecha en sus ojos—. ¿Quién es exactamente esta chica? ¿Por qué me llama tía de repente?
No solo Fang Xiu Min y Liang Jia Hao, sino todos los invitados en cada rincón de la sala, estaban pasmados.
—Tú eres… —Fang Xiu Min miró a la mujer con duda y vacilación.
