Wu Yu llevaba tiempo pensándolo. Al ver a Lei Bing así, ¿cómo iba a resistirse? La empujó contra el escritorio de la oficina. Poco después, un sonido ambiguo resonó en la oficina.
Un momento más tarde, el sonido desapareció. Wu Yu y Lei Bing se arreglaron la ropa y se sentaron.
Wu Yu dio una calada a su cigarrillo y soltó una burla —¿Zheng Youcai quiere darle la vuelta a la tortilla? ¡Que siga soñando! Siempre había sentido celos de Zheng Youcai desde la universidad. No fue fácil encontrar una oportunidad para desahogar su enojo. ¡De ninguna manera permitiría que Zheng Youcai volviese a ganarle! Además, cuando pensaba en lo que había hecho durante todos estos años, la rabia le hervía.
