—No es buena idea golpear a alguien. Estás lastimando a otros sin beneficiarte a ti mismo... Olvídalo, no menciones su nombre. Es una oportunidad tan rara para que conozca a tus amigos. Estoy un poco nerviosa. ¿Qué debo hacer?
Shen Fanxing sonrió mientras se frotaba el vientre.
—No lo estés. Solo tienes que quedarte a mi lado. No dejaré que se acerquen a ti.
...
En el salón privado de la Corte Imperial.
A medida que pasaba el tiempo, aquellas personas que habían estado de fiesta antes se sentaron en el sofá. Miraban la pantalla LCD simultáneamente en silencio, mientras sus expresiones se volvían más solemnes.
Las pocas mujeres que habían sido invitadas antes fueron expulsadas por Yin Ruijue.
Ellos miraban la pantalla y echaban miradas furtivas hacia la puerta de vez en cuando. Parecían como si estuvieran sentados sobre agujas.
