—Pareces ser demasiado inteligente —dijo Shen Fanxing. —¿De verdad...?
Bo Jinchuan no se perdió sus reacciones sutiles, y sus ojos se oscurecieron.
—¿Tienes planes para mañana? —preguntó Bo Jinchuan, cambiando suavemente el tema.
—Todavía no. ¿Tú tienes planes?
—Sí, deberíamos visitar a la abuela.
Shen Fanxing asintió y respondió:
—Vale, hace mucho que no la visito —calló por un momento antes de decir—. Vayamos temprano mañana. Así podremos pasar más tiempo con ella.
—Vale.
—Por cierto, te escuché mencionar la marca de joyería. ¿La otra parte te está pidiendo que compenses por la ruptura del contrato?
Bo Jinchuan levantó la vista hacia ella y dijo:
—No tienes por qué preocuparte por eso. La compensación no existe.
Shen Fanxing no mostró una expresión de disculpa y respondió:
—Ya que el Sr. Carlos mencionó la compensación, podría estar desesperándose. Sin embargo, la compensación no llenará el pozo sin fondo.
